El Málaga se aleja de la zona europea

No se arrepentirán los que hayan usado el puente para salir de Málaga y no caer en la cuenta de que había fútbol en La Rosaleda. Efectivamente, había programado un partido, pero no hubo fútbol. Sólo el Málaga salió con fuerza y Sandro lo hizo fácil. Recibir y tocar rápido habilitando una y otra vez a Agostinho por la izquierda. No obstante, de las numerosas internadas, pocos balones llegaron en condiciones de remate al área. Esta buena disposición con algunas ocasiones para los locales duró algo menos de media hora. A partir de ahí, el caos. Mientras, los jugadores del Oviedo no se empeñaron en desacreditar las poco cariñosas declaraciones del entrenador Antic hacia sus pupilos.

El sopor repartió puntos que no le sirven a ninguno de los dos equipos para sus aspiraciones. El Málaga ve peligrar la clasificación para la UEFA y el Oviedo parece abocado a la Segunda a tenor del difícil calendario que se le avecina.