Tras la pista de Montesinos
La policía venezolana estrecha el cerco alrededor del ex asesor presidencial de Fujimori
Las presiones de la prensa peruana y venezolana parece que causaron su efecto en el Gobierno de Venezuela para que se decidiera a emprender la búsqueda y captura de Vladimiro Montesinos, después de manifestar desinterés por el caso a pesar las reveladoras fotografías publicadas hace 15 días sobre la operación plástica realizada en su rostro.
De acuerdo con las declaraciones de las autoridades venezolanas, dadas el jueves, todo hace indicar que de un momento a otro el ex asesor de seguridad del ex presidente Alberto Fujimori podría salir de su escondite y aparecer en territorio venezolano, o cerca de sus fronteras, y entonces sería detenido y entregado a la justicia peruana.
En comparación con sus evasivas declaraciones anteriores, el ministro venezoalno del Interior, Luis Miquilena, fue más preciso el jueves al señalar que "los cuerpos de seguridad están investigando si Montesinos" estuvo o continúa en Venezuela, lo que en opinión de los analistas es un cambio de actitud que podría derivar en su pronta detención.
El ministro dijo que "no me extrañaría que Montesinos esté en Colombia o en cualquier otro país porque gente de esa naturaleza tiene muchos contactos, recursos y cómplices", incluso en Venezuela. Aunque no descartó que "puede estar" en el país y "tener cómplices venezolanos de acuerdo a las hipótesis que se han estado manejando".
Mientras, el ministro del Interior de Colombia, Armando Estrada, señaló que "puedo decir de manera contundente que no tengo ningún tipo de información" queseñale que el prófugo peruano se encuentre refugiado en territorio colombiano.
Eliecer Otaysa, director de la DISIP, la policía política venezolana, por su parte, aseguró que Montesinos "se les escapó de las manos" cuando entró en Venezuela en diciembre pasado para hacerse la cirugía plástica en el rostro en una clínica de Caracas.
La Fiscalía General de Venezuela también inició diligencias, que incluyen el interrogatorio de los supuestos cómplices de Montesino: los funcionarios de la Embajada de Perú en Caracas, los médicos que le operaron y los abogados que le representan.
La investigación del caso Montesinos está a cargo de los fiscales Francisco Javier Alvarez y Rocío Gásperi, quienes subrayan que su actuación será sólo "tangencial" para averiguar el extravío de 20 pasaportes desde julio del año pasado, entre los cuales se encuentra el de Manuel Antonio Rodríguez Pérez, la identidad falsa que utilizó el prófugo peruano para ingresar en Venezuela, registrarse en la clínica de cirrugía plástica y en el hotel Ávila.
Entre los funcionarios de la Embajada peruana que van a ser citados por la Fiscalía como presuntos colaboradores de Montesinos se cuentan el agregado policial Miguel Bernedo Boado y el oficial Oswaldo Sixto Hurtado Cáceres. Ambos han sido acusados por la Policía Técnica Judicial y el jefe de la Interpol en Venezuela, Felipe Ventura, de haber colaborado en la huida de Montesinos, por lo menos desde la clínica donde fue operado en diciembre.
Los cómplices venezolanos son los abogados Efraín Muñoz y su socio Gonzalo García Mena, quienes han reconocido a la prensa local haber asesorado legalmente a Vladimiro Montesinos en sus negocios, tanto dentro como fuera de Venezuela. Estos asesores legales solicitaron la apertura oficial de la investigación para aclarar que su vinculación es exclusivamente " profesional" y que en ningún momento " colaboraron en su entrada ilegal en territorio venezolano".
La lista de los supuestos colaboradores también incluye a los médicos de la caraqueña clínica Instituto Diagnóstico, el cardiólogo Carlos Mora, quien refirió a Montesinos al cirujano plástico Lorenzo Di Cicilia.
En sus declaraciones a la prensa venezolana Di Cicilia dijo que no sabía a quien operaba pero que le pareció extraño que el doctor Carlos Mora nunca se separara de Montesinos ni siquiera en el quirófano. "Y me sorprendió mucho que se fuera en el coche de Mora por la puerta trasera de la clínica horas antes de darle de alta, cuando empezó el cerco policial para su captura", que no llegó a concretarse.
El misterio de su paradero podría despejarse pronto toda vez que el cerco policial parece que se va estrechando, a la luz de las últimas declaraciones de las autoridades venezolanas.
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