Los delegados de Urbanismo de las siete grandes ciudades españolas exponen sus proyectos en Sevilla

Antes de dar por inauguradas las jornadas, el alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín, abogó por 'preservar la autoridad municipal'a la hora de establecer 'cuáles tienen que ser los espacios por donde debe transcurrir la ampliación de una ciudad'. Según el alcalde, en los últimos años se ha detectado un 'importante recorte' del papel atribuido a los ayuntamientos en el planeamiento urbano.

'Sería un error volver a los viejos tiempos en los que la falta de planificación llevó a circunstancias cuyas consecuencias aún pagamos hoy', advirtió Monteseirín. El alcalde subrayó que en Sevilla existen 'claros ejemplos' de una ampliación urbanística 'precaria' que, a la postre, han obligado a 'salir en socorro de deficiencias de infraestructura y falta de planificación'.

Monteseirín también aludió a la necesidad de asegurar un 'desarrollo equilibrado' y relacionó esta teoría con su apuesta por una 'ciudad policéntrica' en la que cada barrio esté dotado de los servicios necesarios para su desarrollo independiente, aunque sin perder de vista una 'ordenación urbanística integral'.

'Se trata casi de hacer un PGOU (Plan General de Ordenación Urbana) por cada barrio, pero de forma que cada una de esas piezas refleje el espíritu que queremos proyectar sobre la ciudad', explicó el alcalde. En este sentido, Monteseirín incidió en que en el nuevo planeamiento de Sevilla se está apostando 'por una ciudad mediterránea donde la configuración urbana sea compatible con la manera de vivir'.

El delegado de Urbanismo del Ayuntamiento de Sevilla, Rafael Carmona, como anfitrión de las jornadas, también intervino ayer en la inauguración, aunque durante la mañana de hoy tiene previsto participar de nuevo para hablar sobre el Plan General de Sevilla.

Espacios más habitables

Sus palabras de ayer fueron para resaltar la idoneidad de organizar una puesta en común de los proyectos, problemas y soluciones urbanísticas de las siete grandes ciudades españolas, justo cuando Sevilla se encuentra inmersa en la revisión de su PGOU. Según Carmona, las actuaciones que se llevan a cabo en otros núcleos urbanos 'pueden tener su reflejo' en la capital andaluza, porque todas las grandes ciudades tienden a utilizar el urbanismo como 'elemento transformador para construir un espacio mucho más habitable'.

El que sí intervino ayer para exponer los principales proyectos de su ciudad fue el delegado de urbanismo de Málaga, Manuel Ramos, que centró su intervención en los tres pilares básicos en los que se asientan las líneas estratégicas de Málaga: medio ambiente urbano, cultura y turismo.

Ramos repasó las características principales del Plan Estratégico que Málaga empezó a diseñar en 1993, así como del PGOU que se terminó de redactar en 1997. Según el delegado, gracias a estos trabajos, 'se ha relanzado la construcción hasta cotas antes desconocidas, se han multiplicado por cuatro las zonas verdes y se han construido 15.000 viviendas'.

Entre los proyectos urbanísticos de Málaga, Ramos destacó el rescate del litoral gracias a la regeneración de todas las playas de la ciudad ; y, sobre todo, eliminar el actual cauce seco del río Guadalmedina, 'una cicatriz que divide en dos la ciudad', y aprovecharlo para el paso de tráfico rodado y una línea de metro.