Arzalluz advierte a los socialistas de que se arrepentirán si se alían con el PP

La ruptura de un eventual acuerdo poselectoral entre el PSOE y el PP en el País Vasco después del 13 de mayo se ha convertido en el principal objetivo del PNV. Si el sábado era el lehendakari Juan José Ibarretxe quien hacía un guiño a los socialistas, sugiriendo que los necesitará para gobernar, ayer fue el presidente de su partido, Xabier Arzalluz, quien les advirtió de que se arrepentirán si se alían 'con la derecha'. Tras la campaña de acoso 'contra el nacionalismo', aseguró Arzalluz, le llegará el turno al PSOE.

La celebración del Aberri Eguna (Día de la Patria para los nacionalistas vascos) sirvió ayer de escenario para que el PNV pusiese a punto su artillería dialéctica con vistas a la inminente campaña electoral. En la Feria de Muestras de Bilbao, y ante miles de simpatizantes, Arzalluz cargó contra el presidente del Gobierno, José María Aznar, a quien acusó de instaurar en España 'una democracia de poca calidad'.

El líder del PNV calificó de 'neofranquista' al PP y aseguró que el verdadero objetivo del Gobierno no es acabar con ETA, sino con el nacionalismo vasco. 'ETA es la espuma y el nacionalismo es la cerveza', declaró. Fue en ese marco en el que, dirigiéndose a los socialistas, les advirtió sobre las hipotéticas consecuencias de una alianza con los populares en el País Vasco. Después de los nacionalistas, aseguró, 'perseguirán a los socialistas y con los mismos medios'.

Eusko Alkartasuna, coligado con el PNV, celebró el Aberri Eguna en Gernika (Vizcaya), donde se reunió también la Asamblea de Electos Vascos (Udalbiltza), de cuyos órganos de dirección ha sido excluida EH. Esta formación reunió a sus seguidores en Pamplona, desde donde su portavoz, Arnaldo Otegi, cargó contra Ibarretxe por tratar de 'rascar unos votos miserables' en el electorado radical.