El Festival Internacional de Música Contemporánea reducirá sus conciertos

Jorge Fernández, nuevo director del Centro para la Difusión de la Música Contemporánea (CDMC), -organismo dependiente del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (INAEM)-, adelantó ayer algunas de las novedades que presentará la 17ª edición del Festival Internacional de Música Contemporánea, un certamen que se celebra anualmente en la ciudad de Alicante. El planteamiento de Jorge Fernández consiste en dotarlo de mayor 'austeridad', lo que supone reducir el número de conciertos y evitar así un festival 'apelmazado'. Consciente de que se trata de una cita musical 'de minorías', la pretensión del flamante director es acabar con su carácter elitista y atraer al mayor número posible de público.

Para ello, el certamen, que se celebrará después del verano, apuesta por la variedad en sus conciertos, sostenidos por la 'calidad', y con una 'vocación al hoy', explicó. Entre los proyectos del también compositor para 'sumar' asistentes al Festival de Música Contemporánea, con una duración de entre nueve y diez días, figura un acuerdo de colaboración con la Universidad de Alicante que aporte iniciativas experimentales, es decir, las nuevas tecnologías aplicadas a la música. En opinión del director, la vanguardia musical 'puede tener una buena acogida'.

Con un presupuesto de unos 60 millones, Fernández auguró que la presente edición será un punto de inflexión en la trayectoria histórica del festival. 'Hay muchos caminos para hacer más asequible el certamen al público', sentenció.