_
_
_
_
_

Casos y cosas

En los juzgados de una ciudad como Barcelona entra de todo. Y 274.251 diligencias, que fueron las que se cursaron el año pasado, dan para mucho. Más allá de los hurtos y los robos, tan frecuentes, la estadística oficial revela, por ejemplo, que las diligencias por delito contra la libertad y seguridad en el trabajo crecieron mucho. De un caso que se produjo en 1999, se pasó el año pasado a 51, probablemente por la mayor sensibilidad de los sindicatos y los trabajadores en denunciar las situaciones abusivas.

En el ámbito familiar, disminuyen las diligencias por abandono de familia (de 377 a 338), pero aumentan las de acoso sexual (de 5 a 17). También crecieron las de violencia doméstica (de 260 a 365) y los casos de usurpación de estado civil (de 2 a 22). En 1999 se había producido un caso de matrimonio ilegal y el año pasado, ninguno.

Más información
Todos los indicadores señalan un aumento de la inseguridad en Barcelona

También se constata un incremento generalizado de las diligencias en las que las víctimas son agentes de la policía. Los delitos de atentado contra la autoridad pasaron de 71 a 104 y los casos de resistencia a los agentes crecieron de 218 a 262. Los funcionarios públicos también fueron víctimas de más delitos de atentado el año pasado, cuando hubo 397 diligencias, casi cuatro veces más que en 1999.

Otros delitos muy variados se mantuvieron en cifras similares, como los de prevaricación (de 29 a 27 diligencias), los quebrantamientos de condena (de 298 a 289). Los casos de alzamientos de bienes se redujeron de 172 a 135 diligencias.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_