El decálogo de Mayor Oreja
Jaime Mayor Oreja, candidato del PP a lehendakari, reapareció ayer públicamente en Vitoria, tras unas semanas recluido por graves problemas familiares, para embarcarse en la larga precampaña para la cita con las urnas del próximo 13 de mayo. Y lo hizo en la capital de Álava para recalcar que en ese pulmón de votos, ya gobernado por el PP, se juega gran parte de su carrera hacia la Lehendakaritza.
Mayor expuso 281 razones para ser candidato: los 281 cargos electos del PP, y dijo tener 13 deudas y obligaciones: las contraídas con las víctimas de ese partido. Rememoró las dos 'encrucijadas históricas' que vivió Euskadi, desde la reforma política a la transición a la democracia con la aprobación de la Constitución y el Estatuto, para concluir que ahora llega la tercera, la de recuperar la normalidad y la confianza. Vaticinó así una 'marea viva y alta' para su partido y otra 'baja' para el PNV, y enumeró el decálogo de su contrato político, personal y ético con Euskadi si es lehendakari:
1. No será una revancha. 'Porque la revancha es la antítesis de lo que nosotros somos. Porque fracasaríamos en el objetivo de la libertad'. Habrá regeneración democrática, igualdad de todos y para todos, comodidad para todos.
2. No habrá engaños. Ni medias verdades, ni estratagemas. 'Diremos la verdad'.
3. No habrá debilidad ante los violentos, ni complicidad. 'No miraremos para otro lado'. Habrá perseverancia hasta que el miedo sea desterrado. Y firmeza hasta desarticular a ETA.
4. No habrá ambigüedad, ni hipocresías, ni repartos de papeles. 'Hay que devolver el valor a la palabra dada'.
5. No habrá golpes de timón. Habrá estabilidad, sosiego. 'Daremos certidumbres'.
6. No habrá imposiciones en el orden cultural, educativo, económico o social. 'Nos comprometemos a derrotar la lacra del terror que ha destrozado familias y valores'.
7. No habrá operaciones de deslegitimación de las instituciones. 'No traicionaremos el Estatuto'. Habrá autoridad política del Gobierno vasco.
8. No se hipotecará la libertad y seguridad de las personas por razones de táctica política. 'Desterraremos la política de los mandos de la policía autonómica vasca'. No recibirá instrucciones la Ertzaintza para llegar tarde. Colaborará en grado máximo con la Guardia Civil y la policía, sin complejos.
9. No se hará tráfico político con la violencia, ni precio de la paz, ni cambalache del miedo.
10. No habrá desprecio ni olvido para las víctimas del terrorismo: habrá restitución moral, recuerdo y honor para ellos en todos los rincones del País Vasco. Habrá regeneración moral. 'Nunca confundiremos ni mezclaremos a las víctimas con los verdugos'.
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