El maratón de Barcelona deja el recorrido olímpico del Maresme y estrena un circuito urbano

El maratón de Barcelona, de 42,195 kilómetros, estrena hoy un nuevo recorrido totalmente urbano con salida y llegada en la avenida de la Reina María Cristina, al pie de la fuente de Montjuïc, y cuyo eje central será la Gran Via, desde la plaza de Cerdà hasta la de Les Glòries, con incursiones en L'Hospitalet, Badalona y Sant Adrià.

Un circuito que sustituye al olímpico de los últimos 12 años entre Mataró y Barcelona. Con este nuevo trazado, la organización y el Ayuntamiento de Barcelona pretenden impulsar la carrera, que en la última edición alcanzó la peor participación de atletas -algo más de 3.000- y sonados fallos organizativos. El cambio del diseño de la prueba también se ha debido a las reiteradas críticas de los atletas al recorrido por la N-II que transcurre por el Maresme, al considerar los corredores que tenía demasiados tramos inhóspitos y sin contar apenas con el calor de los espectadores, pese a su pedigrí olímpico. La soledad del atleta se acentuaba cuando el corredor de maratón tenía que conformarse con escuchar el resonar de sus propias zapatillas a su entrada a Barcelona.

La ciudad apuesta decididamente por un maratón urbano en un intento de conseguir, para los 3.500 inscritos, un trazado todo lo llano que permite la orografía de Barcelona, además de implicar al ciudadano en una matinal que se completará con otras actividades deportivas. Paralelamente, habrá una marcha popular de 21 kilómetros (entre las 8.00 y las 15.00 horas) que transcurrirá por varios barrios de la ciudad, además de un minimaratón escolar en Montjuïc.

Con este nuevo recorrido, la organización pretende incrementar el número de participantes hasta llegar a 10.000 en el año 2004. El tramo por el que discurrirá el maratón estará cerrado al tráfico de vehículos entre las 8.30 y las 14.30 horas.