Exaltación jerezana

Esta Trilogía del Pipa es una recopilación de secuencias de las tres obras que el bailaor lleva realizadas con su propia compañía. El Pipa ha tenido el buen acuerdo de no repetir estilos y no copiar las versiones anteriores. Cambian las intepretaciones, cambian sus artífices. Así la soleá, ahora la cede a Concha Vargas. Concha y Juana se enzarzaron en unas soleares de nervio y fiebre, lo que no quiere decir que alguna de ellas perdiera la cabeza. Al contrario, sabían muy bien lo que hacían, y lo hicieron por lo jondo y por derecho. Fernando Terremoto empezó por martinetes y siguiriyas que bailó El Pipa. Su mejor baile, con el gran cante de Terremoto. Los dos compadrearon en un formidable toma y daca de arte superior. Terremoto cantó con una autoridad propia de un maestro. Las bulerías al golpe, sin guitarras, fue alternándolas con los demás cantaores. Una hermosa página de cante jerezano de la mejor ley. Moneo y Tañé, espléndidos, y Juana la del Pipa, un caso. La farruca que bailó El Pipa la tengo para mí en cuarentena. Una gloriosa fiesta por bulerías echó el telón. Arte de Jerez nuevamente en lo más alto. Y el público en pie, naturalmente.