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Reportaje:APUNTES

Disenso histórico

200 firmas apoyan un manifiesto sobre la reforma de la enseñanza de la Geografía y la Historia

'Es una inmensa burla de mal gusto hacia los profesionales que desde hace ya 20 años desarrollaban programaciones alternativas al programa de 3º de BUP', se puede leer en un manifiesto que recoge el 'malestar' de numerosos profesores de Geografía e Historia 'por los nuevos decretos de enseñanzas mínimas de la ESO y el Bachillerato'. Dolores Sánchez, del Instituto Ramón Lull de Valencia lo presentará en público esta tarde en la sede de CC.OO. de Valencia. Se han recogido hasta ahora más de 200 firmas de profesores, sindicatos, partidos políticos, asociaciones académicas, universidades etc., que se oponen a los cambios introducidos por el Ministerio de Educación en estas enseñanzas. La reforma de las Humanidades trazada por el Gobierno marcará el funcionamiento de la enseñanza de la Historia en el futuro. Las críticas son múltiples y variadas, y van desde la sobrecarga lectiva, al rancio contenido de los temarios y a una clara política uniformizadora que ha excluido a los agentes sociales del proceso.

Se critica una concepción de la Historia 'obsoleta' y 'encasillada en unos conocimientos poco plurales'

Según el comunicado, los contenidos subvierten los avances historiográficos y didácticos en el contexto de la Unión Europea y el método de elaboración de los mismos es propio del momento de gestación de los programas de 1975. Todos los firmantes denuncian la 'gestión secretista y el resultado arcaizante' de unos temarios redactados al margen de los profesionales: 'No ha existido, ni debate social ni discusión entre expertos, ni negociación política. Desconocemos los nombres y apellidos, pero por la concepción del currículum elegido, parece confeccionado por un grupo de afines ministeriales que desconocen la realidad de las aulas de secundaria y no deben haberlas pisado nunca', denuncia el manifiesto.

Las críticas afectan a la concepción 'obsoleta' y 'encasillada en unos conocimientos poco plurales' que conciben la historia como 'un espacio para el adoctrinamiento', en el que no hay lugar para nuevos grupos temáticos: la historia de mujeres, la 'gente sin historia' o la historia comarcal, entre otras.

Pero, además, y de acuerdo con los profesionales, esta secuenciación de las materias trae aparejada lacras en el aula: mayor conflictividad de los alumnos, aumento del fracaso escolar y frustración de los docentes. Por si fuera poco, los contenidos son inabarcables por curso: 'Es imposible comprender la Historia de España desde sus orígenes con tres horas semanales, ¿desde la hominización hasta nuestros días?'. Para demostrar la actual 'banalización y vulgarización' del tratamiento de las materias los firmantes comparan el marco educativo español con otros modelos. El cálculo es fácil y toman prestada la experiencia francesa en la que el mundo contemporáneo se fracciona en dos cursos, el equivalente a nuestro primero de bachillerato. La superficialidad de los resultados prosigue en el temario de Historia del Arte en el que se aparcan aspectos como los estudios de los medios visuales de comunicación de masas, la conservación y el patrimonio artístico.

En Geografía, reprochan, se abre una página similar: en Bachillerato se asiste al sesgo ideológico; mientras que en la ESO, el retroceso en la formulación de los contenidos retrotrae la enseñanza 30 años. Así, el contenido del programa de ESO 'engaña' al profesorado con una organización de contenidos para el primer ciclo (12 y 14 años), y en el caso de Bachillerato se minusvaloran las diversidades del medio geográfico español para reforzar los valores de cohesión territorial.

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Asimismo, disienten de la metodología docente, suplantada por la lección del loro, en la que el alumno expone fechas y conceptos de manera mecánica y que en absoluto asegura el aprendizaje del pasado. Esta incertidumbre se traslada a las Pruebas de Acceso a la Universidad. 'Si son consecuentes con el temario vigente -razonan irónicamente- ¿deberán superar los alumnos una prueba modelo programa televisivo de éxito?' Por todo ello, exigen al Ministerio de Educación que reflexionen sobre las consecuencias que los nuevos decretos pueden producir en el sistema educativo.

Junto con la lectura del manifiesto se presentará el libro Didáctica de la Geografía e Historia en un mundo globalizado y diverso, copublicado por la Universidad de Valencia, la Federación de Enseñanza de CCOO y grupos de renovación pedagógica: Gea-Clio y Kairós fruto de unas jornadas celebradas el pasado mes de junio sobre la materia.

Apenas tres días antes de la presentación del libro, reconocidos especialistas de la Historia, reunidos en la Universidad de Valencia analizaron la problemática de estas enseñanzas. El debate goza, por tanto, de plena actualidad. La convicción de que el marco educativo de las Humanidades merece una nueva evaluación no sólo está presente en Valencia. En Galicia ya se ha presentado un manifiesto similar y colectivos estatales han intervenido en debates sobre la reforma de las Humanidades, en terrenos como Música y Plástica.

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