Barceló acusa a la Generalitat de no aprovechar el peso catalán en el mercado de telecomunicaciones

Barceló dijo que espera que las anunciadas desinversiones de estas participaciones no se destinen a reducir el déficit de la CCRTV, sino a inversiones 'en un programa específico de promoción del sector de las telecomunicaciones en Cataluña, por ejemplo, en Localred'. La Generalitat posee el 25% del capital en la operadora de telecomunicaciones al-pi / Uni2, y el 13% de Tradia.

Al-pi ha comunicado que no podrá cumplir su compromiso de llevar la banda ancha a todas las capitales de comarca en marzo de 2001. Tradia es el nuevo nombre de Difusión Digital después que la Generalitat la vendiera a ACESA por adjudicación directa.

El diputado del PSC acusó ayer al Gobierno catalán de 'desaprovechar la oportunidad de que los operadores de telecomunicaciones ingresen un billón de pesetas este año en Cataluña para captar de ellos inversiones productivas y de investigación y desarrollo'. Barceló exige un 'cambio radical' de la actuación del Gobierno de la Generalitat en el sector de las telecomunicaciones.

Barceló criticó también el 'absentismo institucional' de la Generalitat en Menta -participada por Endesa (40%), Telecom Italia (27%) y el BSCH (20%)- y exigió al Gobierno catalán que se mantenga firme en el mantenimiento de la exigencia de cumplimiento de los acuerdos con Menta para cablear Cataluña. Menta tiene unos compromisos de inversión en Cataluña de 30.000 millones de pesetas este año.El diputado socialista Miquel Barceló acusó al Gobierno de la Generalitat de 'no saber arrancar inversiones productivas y de investigación de las operadoras de telecomunicaciones a pesar del peso de Cataluña en el mercado de consumo de este sector'. Barceló afirmó: 'Cualquier gobierno normal hubiera sabido traer propuestas de inversión tecnológica en los concursos de telefonía móvil. En Cataluña, el resultado es cero y se ha producido una evidente pérdida de oportunidades'.

Asimismo puso como ejemplo de resultado de políticas públicas orientadas a la inversión en el sector tecnológico al operador vasco Euskaltel. Barceló añadió irónicamente: 'Cataluña puede tener el récord mundial de sedes virtuales, como la de Terra, sin que eso signifique inversión tecnológica en la comunidad autónoma'.

En ese sentido, recordó que los 40.000 millones de pesetas de inversión de Telefónica en Cataluña son inversiones en redes, 'pero no productivas ni de investigación y desarrollo, y destacó que Telefónica concentró en Madrid y Valladolid sus 22.570 millones de pesetas de inversión en investigación y desarrollo (I+D) para 1998.

De acuerdo con los resultados que Telefónica obtiene en la Cataluña, 'lo lógico sería', dijo Barceló, que Telefónica invirtiera en ella 'el 20% de su capítulo de I+D; es decir, unos 5.000 millones de pesetas'.

Respecto a Retevisión/Auna, afirmó que su sede en Barcelona 'es virtual' y que 'no ha respondido a lo que un alto cargo de Industria definió como la Seat del siglo XXI'; también explicó que Menta / Auna (llamada antes Cable y Televisión de Cataluña) atraviesa una crisis de dirección y de modelo de negocio, que 'su sede se ha convertido en una delegación provincial de Auna' y que espera que la Generalitat le exija el cumplimiento de sus compromisos de cablear Cataluña.

El diputado socialista añadió que el caso de al-pi/Uni2 ha demostrado que 'ni con una red creada con dinero público ha podido consolidarse una empresa catalana con sede en Cataluña'.

Barceló propuso, como había hecho antes el alcalde de Barcelona, Joan Clos, 'el traslado a Barcelona de la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones [CMT]', propuesta que ha trasladado al grupo parlamentario y de senadores del PSOE en Madrid. Barceló afirmó que el responsable económico del PSOE, Jordi Sevilla, está de acuerdo en que la CMT se ubique definitivamente en Barcelona.

'Este traslado', afirma Barceló, 'es un elemento simbólico que rompería la tendencia a la marginalidad de Cataluña en materia tecnológica'.

El diputado señaló: 'No es neutro el lugar donde se ubique la CMT, porque muchos operadores querrán estar cerca del organismo regulador de las telecomunicaciones'.