Zaplana apela al consenso sobre el plan hidrológico

Eduardo Zaplana, presidente de la Generalitat, colocó ayer en Pinedo la primera piedra de la que será 'la depuradora más importante de Europa' y aprovechó la carga simbólica del acto para apelar al consenso de toda la sociedad valenciana en torno a la actual redacción del Plan Hidrológico Nacional (PHN). 'No hay argumentos de sentido común para oponerse', sentenció.

El presidente aludió a la 'política integral del agua' que ha desarrollado el Consell desde su acceso al poder en 1995 y afirmó que en materia de control y reutilización de recursos 'nadie ha realizado sus deberes mejor que nosotros'. Zaplana aseguró que el Consell ha construido 130 depuradoras durante los últimos cinco años; que algunos municipios valencianos son capaces ya de reutilizar todo el agua que circula por la red de abastecimiento; y que el riego por goteo se extenderá a todos las explotaciones agrícolas de la Comunidad Valenciana.

El presidente aludió al carácter 'milenario' de las reivindicaciones de los agricultores valencianos en materia de agua, sugirió que el plan hidrológico satisface esas aspiraciones y pidió 'altura de miras' a quienes todavía plantean reparos hacia el proyecto del Gobierno de José María Aznar.

En su breve alocución, Zaplana se preguntó por los 'ocultos intereses' que mueven a quienes rechazan el PHN e invitó a toda la sociedad a sumar esfuerzos para despejar los últimos pasos de la tramitación del proyecto estatal: 'Cuando pedimos agua a las cuencas excedentarias, que no sea sólo una política del gobierno, sino de toda la Comunidad, del conjunto de la sociedad valenciana'.

A pesar de sus invitaciones al acuerdo, tanto el PSPV como el Bloc denunciaron ayer maniobras del PP para 'sacar tajada política' de un proyecto del Gobierno central. Andrés Perelló, portavoz socialista en las Cortes, acusó hoy al Grupo Popular de intentar 'quebrar el consenso' que ya se alcanzó hace meses en el Parlamento autonómico sobre el PHN y lamentó que los populares valencianos 'intenten sacar tajada política de temas de Estado'.

Según Perelló, 'parece que al PP no le ha gustado lo más mínimo que llegáramos a un acuerdo en la iniciativa que se votó'. El portavoz socialista sugirió que el PP se 'enfada' cuando se alcanzan acuerdos en torno a los grandes temas y concluyó: 'No consideramos que tenga que ser reiterada la aprobación de lo que ya se aprobó en su día'.

Vicent Cardà, responsable de agricultura del Bloc, por su parte, pidió a los dirigentes del PP que 'se dejen de realizar declaraciones desafortunadas y de buscar permanentemente el enfrentamiento' y 'se pongan a trabajar para unir esfuerzos y hacer realidad una política hidráulica solidaria'. Carda apostó por un pacto del agua valenciano entre todas las fueras políticas y sociales para 'defender e introducir una nueva cultura del agua, basada en el ahorro, la modernización de las estructuras agrarias, la depuración de las aguas residuales y su reutilización'.