Llega el campeonato más igualado

Con siete marcas inscritas y media docena de pilotos aspirando a cada victoria, el Campeonato del Mundo de rallies, que arranca hoy en Montecarlo, acentúa la igualdad que se vivió en 2000. La nueva temporada comienza con pocas novedades y los favoritos son los clásicos. Entre ellos está un año más Carlos Sainz, que continúa en Ford. Cumple su 14ª temporada en el Mundial y su objetivo sigue siendo conquistar su tercera corona.

Peugeot, Mitsubishi, Subaru, Ford, Hyundai, Skoda y Citroën son los constructores que afrontan esta aventura de 14 carreras, con rallies sobre hielo, tierra o asfalto en los cinco continentes. En el calendario figuran las mismas pruebas que el pasado año, incluido el Rally Catalunya, que se adelanta a finales de marzo.

En el mercado de los pilotos hay dos cambios significativos. La retirada de la escudería española Seat propició el fichaje del francés Didier Auriol por Peugeot y el antecesor de éste, su compatriota François Delecour, se convirtió en el tercer hombre de Ford, junto a Sainz y Colin McRae. La mayoría de las marcas alinearán tres coches en cada carrera.

'Peugeot es el equipo a batir', dice Sainz, de 38 años; 'por mi parte, intentaré volver a pelear por ganar carreras y estar luchando por el título al final del año'. El mayor cambio para el español estará en los neumáticos, pues utilizará Pirelli en vez de Michelin. En las gomas está también una de las pocas modificaciones del reglamento, ya que se ha restringido el número a elegir en cada rally.

El pasado campeonato, resuelto en la última carrera a favor del finlandés Marcus Gronholm, resultó un anticipo de lo que puede pasar este año. En 14 rallies hubo seis vencedores, con cuatro coches diferentes, y todas las pruebas fueron emocionantes. Este año habrá que volver a contar con Gronholm, Sainz, Auriol, McRae y Richard Burns (Subaru). En algunos rallies participará también Jesús Puras (Citroën).

Los rectores del campeonato, obsesionados por conseguir una mayor repercusión mediática, continúan concentrando y recortando los recorridos para hacerlos más televisivos. De esa manera, cada rally pierde personalidad, pero gana en audiencia, sobre todo ahora que todos ellos se disputarán en tres jornadas, siempre de viernes a domingo.