Los ministros europeos sostienen que un frenazo brusco en EE UU provocará una recesión mundial

Los ministros de Finanzas de Alemania y Francia, Hans Eichel y Laurent Fabius, advirtieron ayer en Japón de que un aterrizaje brusco de la economía estadounidense provocaría una recesión para la economía mundial y se mostraron a favor de una desaceleración suave, que favorecería también a Estados Unidos y al nuevo equipo de la Casa Blanca. 'A todos nos interesa que la actividad de Estados Unidos experimente un aterrizaje suave, y espero que la política de la Reserva Federal estadounidense (Fed) y de la nueva Administración eviten una desaceleración brusca', indicó Eichel, durante una rueda de prensa ofrecida junto a Fabius en Tokio. Según señaló su homólogo francés, 'es evidente que una desaceleración muy marcada de la economía de Estados Unidos tendría un efecto sobre el crecimiento europeo'. Sin embargo, pese a reconocer el 'cambio de perspectiva que la economía mundial ha experimentado en los últimos seis meses', Fabius no consideró que el escenario actual sea negativo.

Por el contrario, señaló como elementos favorables la bajada del precio del petróleo y la recuperación del euro y consideró que 'si la evolución de la economía en América es razonable, el efecto en Europa no será demasiado importante'.

Según Eichel, las reformas estructurales iniciadas en Europa, y en especial los programas de reducción de impuestos aplicados en los principales países de la UE, suponen un apoyo importante para la actividad económica y, junto a la caída de los precios petrolíferos, permitirán un aumento de la capacidad adquisitiva de los hogares europeos. 'Ello supone que el mercado interior europeo es más fuerte y depende menos de las exportaciones' y se une al efecto positivo que tendrá el proceso de ampliación de la Unión Europea, que aumenta considerablemente el mercado de las empresas del Viejo Continente debido a las elevadas tasas de crecimiento que tienen los países del Este de Europa.