Los niveles de ozono nocivos para la salud se superan 100 días al año, según el director del CEAM

El director del Centro de Estudios Ambientales del Mediterráneo (CEAM), Millán Millán, asegura que en la Comunidad Valenciana 'se superan ampliamente los niveles de ozono considerados nocivos para la salud: un promedio de 22 días al mes durante los cinco o seis meses de la primavera y el verano, cuando la directiva europea establece que sólo deben superarse [como máximo] los 20 días al año'. Después de haber participado, desde 1986, en cinco proyectos de la Comisión Europea para documentar la dinámica y la formación de contaminantes en toda la cuenca mediterránea occidental, Millán Millán lamenta que 'a pesar que desde hace tiempo advertimos desde el Centro de esta situación, ni el gobierno central, ni el autonómico, han tomado conciencia de la gravedad del problema'. El director del CEAM pide a estas administraciones que reduzcan de forma drástica el nivel de emisiones en todo el arco mediterráneo.

Tras el ácido fluorhídrico, el ozono es uno de los componentes químicos de la atmósfera que reacciona con mayor virulencia sobre la materia orgánica. En la producción de este potente oxidante interviene de forma directa el hombre; sobre todo por las emisiones de óxidos de nitrógeno de los vehículos e industrias, que al reaccionar con la radiación solar, se transforman en óxido nítrico, nitratos, y ozono. La evacuación de estos agentes a la atmósfera se ha cuadruplicado desde 1973 en la Comunidad Valenciana -coincidiendo con el desarrollo económico-, según la Unión Europea y la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Millán Millán explica que 'las brisas que por el día se adentran en el interior y vuelven por la noche en altura al mar, impiden que se regenere el aire, de tal forma que los contaminantes permanecen estancados mucho más tiempo que en otros lugares'.

Los efectos del ozono en la salud son imprevisibles. El director del CEAM asegura que según datos de la OMS, con concentraciones similares a las medidas en la provincia de Castellón, cuya estación de registro es la mejor documentada de toda Europa, 'el ozono puede ocasionar el agravamiento de las enfermedades cardio-respiratorias, y la reducción de la esperanza de vida de los pacientes, así que una persona que debería morirse de un ataque cardíaco en dos ó tres años, lo sufre un poco antes: en cinco o seis meses'.