'Los planes de estudio antiguos plantean conflicto a las facultades'

La catedrática de Derecho Civil de la Universidad de Málaga Ana Cañizares acaba de aterrizar a los 41 años en su nuevo cargo de vicerrectora de Ordenación Académica, con lo que la cabeza del equipo de gobierno del ente docente queda compuesto fundamentalmente por mujeres. Agradece la confianza del rector, Antonio Díez de los Ríos, aunque pide una tregua hasta que se vaya instalando en su nuevo sillón. Esta madrileña, que llegó a Málaga en 1992, cree que con organización podrá soportar el trabajo extra que le viene encima.

P. ¿Qué sensaciones siente en su nuevo cargo?

R. Acabo de tomar posesión y necesito coger el ritmo del cargo, aunque puedo aportar la experiencia adquirida en el decanato de la Facultad de Derecho y la Autónoma de Madrid, donde desarrollé la labor de Ordenación Académica.

P. ¿Cuáles serán las líneas generales de su vicerrectorado?

R. Estamos en un momento en el que lo primero es culminar el impulso de los nuevos planes de estudio en una universidad que desde 1995 ha pasado de 2 a 40 titulaciones propias. Esto supone un crecimiento importante que remolca a otros sectores como el profesorado, algo de lo que estaba necesitada esta universidad. La premisa es seguir en esta dirección.

P. ¿La Facultad de Derecho puede soportar este cambio en los planes?

R. Sí. En Málaga, donde sigue vigente el plan de 1957, partimos con ventaja al poder aprender de los errores de otras facultades de Derecho, que en un principio cambiaron a los cuatro años de carrera para volver posteriormente a los cinco cursos.

P. ¿Cómo valora la estructuración por créditos?

R. El mantenimiento del plan antiguo plantea conflictos a una facultad, ya que todos los aspectos de la universidad giran entorno a la estructuración por créditos, como el presupuesto o los horarios. Además, los planes antiguo resultan negativos a la hora de las convalidaciones con universidades extranjeras.

P. ¿El nombramiento supondrá algún cambio en el departamento de Derecho Civil?

R. Los cauces en el departamento continuarán igual. Seguiré dando clases y dirigiendo las tres tesis que llevo. Lo único que significa el vicerrectorado es más trabajo, que se puede solventar con una buena organización.

P. ¿Qué opina de la inclusión de mujeres en los puestos de responsabilidad de la universidad?

R. Es gratificante que se nos dé un amplio margen para demostrar que podemos hacer una labor igual a la de los hombres.