La defensa del 'caso Nazaret' pide que se absuelva a los imputados

El abogado defensor del matrimonio acusado de la muerte el 4 de diciembre de 1998 de un camionero en el barrio de Natzaret tras atropellar éste a un bebé, ha pedido la absolución de sus clientes. El letrado asegura que Soledad M. Amador no participó en el linchamiento que acabó con la vida de Antonio Civantos. En el caso de José Muñoz, pide que se le aplique la eximente completa por enajenación mental.

El letrado Jaime Sanz de Bremond estima que los servicios psiquiátricos de la Generalitat han acreditado suficientemente que José Muñoz sufre un retraso mental importante. Bremond, que dio a conocer ayer en los pasillos de la Audiencia de Valencia parte de su escrito de defensa, comentó que 'el importante retraso mental' de su cliente unido 'a la visión de la cabeza chafada de su hijo' provocó la reacción fatal que acabó con la vida del camionero Antonio Civantos, que atropelló accidentalmente al bebé.

El letrado explicó también que en caso de que no se acepte su petición de eximente completa por enajenación mental, lo que posiblemente implicaría el internamiento psiquiátrico del acusado, solicitaría al tribunal que se le aplicara una atenuante o una eximente incompleta. Las dos peticiones suponen una considerable rebaja de los años de prisión a cumplir.

El pasado noviembre el fiscal que instruye el caso pidió para los dos acusados 12 años de prisión por un delito de homicidio con la agravante de abuso de superioridad y la atenuante de arrebato y obcecación para los dos acusados. Por su parte, la letrada Carmen Peris, que defiende a la viuda del camionero asesinado, pidió para los acusados una pena de 24 años y seis meses y el pago de 50 millones de pesetas. Peris considera que los imputados son responsables de un delito de asesinato con agravantes de alevosía y ensañamiento.