El Guadix paga con una goleada en la Liga, 6-0, la resaca de la Copa

El Guadix pagó ayer muy caro el no ser capaz de abstraerse en su partido con el Dos Hermanas (6-0) de la obnubilación en la que se sumergió tras su gesta del miércoles en los dieciseisavos de final de la Copa, en los que, en un partido vibrante (4-4), que se resolvió por penaltis (6-5), eliminó al mismísimo líder de la Primera División y subcampeón vigente de la Liga de Campeones, el Valencia de Héctor Cúper.

Pero ayer no era un día para seguir con las celebraciones y el Guadix, aún encandilado, se topó de lleno con la crudeza de la Liga de la Segunda División B, en la que lleva seis jornadas sin ganar, en la que aún no conoce el triunfo lejos de su campo y en la que ocupa el último puesto de la clasificación en el Grupo IV con 12 derrotas, dos victorias y seis empates.

Una dura realidad que se plasmó en las seis veces que el portero del equipo accitano, Jesuli, hubo de sacar el balón de su red y en la poca efectividad mostrada por Pollo, Pichi y Samuel, los tres jugadores que lograron amilanar a la defensa valenciana y dar a Palop una noche trágica.

El técnico del Guadix, Antonio Teixidó, achacó la goleada -jugó casi el mismo once que contra el Valencia, salvo las bajas del delantero Pedro y los centrocampistas Kuni y Navarro- en el estadio Manuel Utrilla, de Dos Hermanas, al tributo que han tenido que pagar sus jugadores por el 'titánico sobreesfuerzo' que supusieron los 120 minutos que invirtieron en superar al Valencia. Un sobreesfuerzo que, según Teixidó, se materializó en forma de lesiones: cuatro jugadores de baja y varios más con molestias musculares.

Pero este nuevo varapalo del Guadix en la Liga pronto quedará relegado al olvido. Tan pronto que hoy por la mañana, en esta localidad granadina, ya sólo se hablará de la inminente cita copera de su equipo con el Granada.

Un derby que, aunque agridulce al principio, se vive ya como una fiesta en toda la provincia, pues uno de los dos equipos, el Granada o el Guadix, estará presente finalmente en los cuartos de final de la Copa para enfrentarse quizá a otro grande.