La nueva oficina de extranjería de Gràcia se colapsa en su primer día de servicio

Cerca de 1.000 personas se agolparon ayer ante la nueva oficina de extranjería de la Travessera de Gràcia de Barcelona, habilitada para descongestionar los servicios de inmigración de la Delegación del Gobierno. La mayor parte de los inmigrantes acudieron a la oficina para obtener el Número de Identificación de Extranjero (NIE), que, pese al falso rumor difundido la semana pasada, no abre la puerta a ningún nuevo proceso de regularización.

Las colas para conseguir el NIE empezaron a primeras horas de la madrugada. Decenas de personas se dirigieron a la oficina habilitada en la Delegación Provincial de Trabajo ataviadas con ropa de abrigo y llevando con ellas mantas, cartones y plásticos. Pasaron la noche al raso. A primera hora de la mañana los extranjeros que guardaban turno ya eran más de un millar, pero algunos no fueron atendidos hasta media tarde.

Muchos de estos inmigrantes son los mismos que la semana pasada colapsaron las oficinas de extranjería de la sede de la Delegación del Gobierno atraídos por un falso rumor que apuntaba que habría un nuevo proceso de regularización. Pese a la falsedad de la información, muchos de ellos salieron de la Delegación del Gobierno con un formulario para solicitar el Número de Identificación de Extranjero, un documento que sólo sirve para abrir una cuenta bancaria o acudir a un notario. Esta solicitud se empezó a entregar ayer y los responsables de la Delegación del Gobierno creen que las colas continuarán hoy y toda la semana. Pese a ello, fuentes de la Delegación del Gobierno recordaron ayer que 'no está previsto ningún nuevo proceso de regularización'.

La mayor parte de los solicitantes que ayer hacían cola eran magrebíes y paquistaníes que no tienen permiso de trabajo ni de residencia. Muchos de ellos forman parte del grupo de más de 35.000 personas que no consiguieron regularizar su situación en España en el proceso que finalizó el pasado 31 de julio. Sin embargo, en las colas de ayer también había personas que han llegado posteriormente procedentes de otros países de la Unión Europea con la esperanza de que España les facilite el permiso de trabajo con más celeridad.

IC-V acude al Defensor

Por otra parte, el presidente de Iniciativa per Catalunya-Verds, Joan Saura, pedirá al defensor del pueblo, Enrique Múgica, que presente un recurso ante el Tribunal Constitucional porque considera que la nueva Ley de Extranjería, que tiene que entrar en vigor dentro de tres semanas, vulnera la Constitución. De momento, Saura ha enviado una carta al Defensor del Pueblo en la que muestra su preocupación por la vulneración de derechos fundamentales que, a su entender, pueden generarse cuando se aplique la nueva ley.