LA ATRACCIÓN DE LA BODA DE MADONNA

El marco alejado y salvaje elegido por Madonna para su boda, que se celebrará mañana, no ha impedido que los medios de comunicación de todo el mundo se hayan precipitado sobre la localidad escocesa de Nordoch -donde tendrá lugar el acontecimiento- con gran alegría de las autoridades turísticas, que se muestran encantadas por esta inesperada publicidad. Por ahora, ya se han reservado en la zona más de 1.000 plazas hoteleras. Según parece, el lugar vale la pena. Madonna se trasladará con su esposo, el director británico Guy Ritchie, después de la boda, al lujoso castillo de Skibo, a unos 10 kilómetros de Dornoch, que tiene 20 habitaciones y 12 pabellones y está rodeado por un parque de 3.800 hectáreas. "Es el lugar más romántico del mundo", ha declarado Catherine Zeta-Jones, la actriz que acaba de casarse con Michael Douglas, una de las habituales del lugar, lo mismo que Bill Gates, Jack Nicholson o Sean Connery. Según el diario británico Sun, fue allí donde Ritchie le pidió a su futura esposa que se casaran durante un fin de semana de amor dos años después de su primer encuentro, en 1998. Madonna y su futuro esposo, acompañados de Lourdes, de cuatro años, hija de la cantante y su ex entrenador Carlos León, y el hijo de ambos, Rocco, de cuatro meses, llegaron el pasado lunes al castillo, en el que ya se habían instalado importantes medidas de seguridad. El martes se unieron el cantante Sting, así como Elton John, que interpretarán su música -que luego se editará en un disco para regalar a los invitados-, la actriz Gwyneth Paltrow y la estilista Stella McCartney, diseñadora del vestido de la novia. La prensa evalúa entre uno y dos millones de libras (entre 274 y 548 millones de pesetas) el coste de la boda, pero John Ritchie, el padre del novio, ha desmentido estas cifras asegurando que sólo han sido invitadas 60 personas. Según parece, Rocco, el hijo de la pareja, será bautizado hoy en la catedral de Dornoch, del siglo XIII, donde se casarán sus padres. La encargada de ambas ceremonias es la reverenda Susan Brown, de 41 años, que ha sido la primera mujer que ofició en una catedral en el Reino Unido. Casada y madre de dos hijos, de 13 y nueve años, es muy apreciada por los feligreses de Dornoch. Confiesa que no tiene ningún disco de la cantante: "Tengo gustos musicales un poco distintos. Yo toco la trompeta, por lo que me atrae más el jazz y la música clásica".-AFP,