Los deportes de invierno vuelven a tener problemas con un presidente

Luis Algar, presidente de la Federación Española de Deportes de Invierno, es uno de los pocos dirigentes que, a diferencia de muchos colegas, no tiene que luchar en estas fechas en las urnas por la reelección, pues su mandato ordinario termina el año 2002. Sin embargo, hoy mismo afronta una moción de censura que incluso puede destituirle. Hasta 11 de los 13 presidentes regionales parecen estar en contra de sus particulares formas de dirigir la federación.Los deportes de invierno viven un ciclo distinto a los de verano (los Juegos serán, precisamente, en Salt Lake City 2002), pero también son un ejemplo parcial del mal momento del deporte español. Cuando parecían remontar el vuelo después de tocar fondo con la larga gestión del presidente anterior, Segismundo Fraile, se encuentran de nuevo en una insólita crisis interna. No hay fracasos recientes y si en otros casos puede dudarse de la capacidad personal de los presidentes para conseguir resultados en la parcela invernal se centra en el protagonismo de Algar.

El éxito de Johann Muehlegg, nacionalizado español para ganar por primera vez la Copa del Mundo de esquí de fondo (a pesar de sus complicados problemas personales), o la leve mejoría de resultados en las esquiadoras alpinas, sólo han sido la pasada temporada la punta pública de un iceberg con serias grietas en la estructura. El presidente se ha ido quedando solo, al abandonarle sus vicepresidentes, Pedro Calls, presidente de la Asturiana, y Ramón Carreras, de la Catalana. Le acusan de no saber gestionar sus competencias, especialmente generar recursos, y además, de tomar decisiones contrarias a las acordadas en la junta directiva. De personalismo excesivo, en suma. Algar responde con que los ingresos bajo su mandato han aumentado un 14% y que ha firmado un acuerdo con un patrocinador por 80 millones para las dos próximas temporadas. Él tiene un sueldo de 14 anuales y también ha dicho a Efe que esperará a que le presenten la moción y a que le expliquen los motivos, pero que no piensa dimitir. Mientras tanto, ha mandado a su casa a su director general y al secretario, porque no son de su confianza. Una federación que prometía nuevos aires, echa humo.

Odriozola, reelegido

José María Odriozola fue reelegido ayer por cuarta vez presidente de la Federación de Atletismo, con el mejor resultado de siempre: 115 votos de 126 presentes y 11 en blanco. Era el único candidato y también así fueron reelegidos Rodrigo de Mesa, en tiro, por tercera vez, y Miguel Ángel Zaborras, en pesca, por cuarta. Debutarán en el cargo, en piragüismo, Santiago César Sanmamed, y esgrima, Marco Rioja, que era presidente de la Madrileña y ex internacional en sable en Barcelona 92.