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La Secretaria del PSOE de La Línea ataca a la dirección provincial tras la infiltración del GIL

La afiliación masiva de simpatizantes del Grupo Independiente Liberal (GIL) a la agrupación del PSOE de la Línea de la Concepción (Cádiz) ha reabierto las heridas en las filas socialistas gaditanas. La secretaria del PSOE de la Línea, Juana María Lasry, arremetió ayer contra la dirección provincial por haber enviado directamente el asunto a la ejecutiva federal, que ha creado una comisión de investigación para aclarar lo ocurrido, y acusó al sector crítico de la localidad de haber propiciado el ingreso de estos militantes del GIL en la agrupación local.

Sector crítico

Lasry, diputada en el Parlamento andaluz, se desvinculó ayer del ingreso de militantes del GIL en su agrupación y tiró por elevación contra la dirección provincial, cuyo secretario provincial es Francisco Vázquez Cañas. "Todo es una trama para evitar que la agrupación de La Línea rompa el equilibrio del partido en la provincia de Cádiz", señaló.No obstante, la secretaria local de La Línea admitió que ha habido "irregularidades" en el censo de la agrupación del PSOE linense. Dijo, por ejemplo, que a lo smilitantes que fallecen no se les da de baja. Lasry reconoció que desde marzo el ceso de militantes socialistas de La Línea ha crecido en 400, pero lo atriubyó a una maniobra de los dos sectores críticos que hay en la agrupación para "acabar" con ella. "Cuando volví de vacaciones el pasado verano había más de 140 afiliaciones nuevas que no pasaron por la aprobación de la ejecutiva local", dijo.

En su defensa, Lasry aduce que ella autorizó el ingreso de 22 militantes procedentes del GIL pero que las dos firmas que avalaban a los nuevos afiliados eran de personas afines al sector crítico de La Línea. Es más, Lasry sostiene que fue ella quién solicitó a la ejecutiva federal del PSOE el inicio de una investigación para esclarecer el trasvase. "Yo fui quien solicitó la creación de la comisión de investigación a la ejecutiva federal, por lo que ahora no pueden decir lo contrario", manifestó Lasry.Por su parte, Vázquez Cañas, atacado por Lasry, insistió ayer en que la ejecutiva federal depurará responsabilidades si ha habido "connivencia de algún compañero o compañera" en la afiliación masiva de personas cercanas al GIL. Vázquez Cañas, que sostiene que fue él quien remitió ala ejecutiva federal los datos aportados por las dos corrientes críticas de La Línea, explicó a Efe que Lasry fue informada de la investigación abierta por la propia comisión federal.

El secretario provincial quiso destacar que la iniciativa de la investigación partió de él y no de Lasry. De hecho, Vázquez Cañas dijo que fue el secretario de Organización del PSOE quien le comunicó a la diputada autonómica la apertura de la investigación, sólo un día después de que él presentara el informe en Madrid. También lamentó Vázquez Cañas que aún no haya podido contactar con Lasry.

El dirigente socialista se congratuló de que el intento de infiltración en las filas del PSOE haya sido detectado por un grupo de "compañeros" y consideró "acertada" la decisión de la ejecutiva federal de abrir una investigación y suspender cautelarmente las 400 afiliaciones que se han producido desde marzo en La Línea.

Entre estas nuevas afiliaciones se encontraban simpatizantes y personas cercanas al GIL, como el antiguo chófer y el guardaespaldas del alcalde de La Línea, Juan Carlos Juárez (GIL), y el secretario general de las Juventudes del GIL. No obstante, Vázquez Cañas precisó que la mayoría eran afiliaciones de "compañeros socialistas".

Por su parte, Juan Carlos Juárez, el alcalde de La Línea, del GIL, afirmó ayer que desconocía la polémica existente entre su grupo y el PSOE linense, y señaló: "Me pilla ajeno porque no he seguido mucho el tema, aunque afecta a nuestros militantes". "Hablaré con el responsable de afiliaciones de mi partido y a lo largo de esta semana ofreceré mi versión", agregó Juan Carlos Juárez.

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