El honor y la cartera

En el aspecto futbolístico, no hay otra cosa en juego para el Deportivo que el pequeño honor de alzarse campeón de grupo y concluir invicto la primera fase de la Liga de Campeones. Aunque también pueden hallarse otros intereses más prosaicos para motivar a los gallegos en su duelo de hoy en Hamburgo (20.45, Canal +): los 56 millones con que premia la UEFA cada victoria en el máximo torneo continental. El entrenador deportivista, Javier Irureta, ha apelado a ambos motivos, el honor y la cartera, para conferir alicientes al choque. "Queremos la victoria, por el prestigio... y también por el dinero", dice el técnico vasco.Con bastante menos frío del que se temía -unos diez grados de durante el día-, Hamburgo recibió ayer a un Deportivo en estado de relajación. Desde hace dos semanas, los gallegos tienen la clasificación asegurada y ahora sólo les queda contemplar cómo los otros tres equipos del grupo - Hamburgo, Juventus y Panathinaikos- se pelean por la restante plaza en la segunda ronda. Irureta quiere que su equipo haga un buen papel, pero, en las circunstancias actuales, tampoco se permite riesgos: ha dejado en A Coruña a cuatro de sus mejores futbolistas -Djalminha, Naybet, Turu Flores y Diego Tristán-, todos con lesiones leves.

Es indudable que alcanzar el primer puesto del grupo daría lustre a un equipo que debuta este año en la Copa de Europa y que para ello les bastaría a los coruñeses con un simple empate. Pero, por mucho que las cuestiones de imagen también cuenten, lo cierto es que el duelo de esta noche tiene una trascendencia menor. Y eso que sus protagonistas tratan de pregonar lo contrario. "Está el prestigio, el dinero y también la cuestión anímica", razonaba ayer Mauro Silva. "Ganar en la Liga de Campeones siempre da mucha moral".

Pero el voluntarismo coruñés se enfrenta al hecho incontestable de que en el Volkparkstadion se medirán hoy dos equipos con estímulos diametralmente opuestos. La relativa indiferencia del Depor contrasta con las urgencias del Hamburgo, que necesita la victoria para continuar en el torneo o, en el peor de los casos, asegurar la tercera plaza que permite incorporarse a la UEFA. De la motivación de los alemanes da una idea la respuesta de su público, que hace ya una semana agotó las 50.000 localidades. El Hamburgo pasaría a la siguiente fase si vence hoy y Panathinaikos y Juventus empatan en Atenas. En todo caso, griegos e italianos cuentan con la ventaja de que dependen de su propio resultado: cualquiera de los dos se clasificaría si alcanza la victoria.

El Juventus podría vivir una noche dramática si pierde en Atenas ya que, en ese caso, incluso podría ser el último del grupo y quedarse sin el consuelo de la UEFA. En ese aspecto, puestos a ser suspicaces, al Depor hasta puede que no le viniese mal perder hoy si con ello consigue dejar fuera a la Juve. "No me importaría que los italianos fuesen eliminados, pero quedan tantos equipos buenos que tampoco es algo que nos preocupe", aseguró Mauro Silva para alejar cualquier sospecha.

Hamburgo: Butt; Hertzsch, Hoogma, Kient; Tofting, Praeger, Hollenbach; Mahdakivia, Barbarez, Ketalaer; y Yeboah.

Deportivo: Molina; Manuel Pablo, César, Helder, Capdevila; Emerson, Mauro Silva; Scaloni, Valerón, Fernando; y Pandiani.