MÚSICA POR VIDA
A los médicos que le salvaron la vida, el presidente de Eslovaquia, Rudolf Schuster, les regaló un concierto. Su amigo, el tenor Peter Dworsky, dirigió el domingo una ópera en la ciudad austriaca de Innsbruck, cerca de la clínica en la que el jefe de Estado eslovaco, de 66 años, fue ingresado de urgencia el verano pasado y donde hace dos años también fue tratado con éxito el presidente de la República Checa, Václav Havel. En el concierto, interpretado por la Orquesta Sinfónica de Eslovaquia y cantado por Lubica Rybarska, Dalibor Jenis y Eva Jenisova, se recaudaron 1.200.000 pesetas, que el director de la clínica, Herbert Weissenböck, empleará para la ayuda médica a niños en países en guerra. El presidente eslovaco vuelve a ingresar hoy, martes, en el hospital tirolés para que sus médicos le retiren, en otra delicada operación, los conductos artificiales de la anterior intervención, que fue indispensable al complicarse una cura de perforación de intestino. En los 10 días de convalecencia, Schuster tendrá que dirigir, desde los Alpes austriacos, el destino de su propia nación.-JULIETA RUDICH,
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.