"Zaplana debería aparcar el tema de las cajas"

El secretario general del PSPV, Joan Ignasi Pla (Atzeneta d'Albaida, 1959), funcionario de carrera de la Generalitat, está "satisfecho" del resultado del reciente congreso, en el que tuvo que elegir entre puridad y pragmatismo. Pla considera que el PSPV tiene, por fin, una dirección sólida y con capacidad de integración dispuesta a trasmitir la imagen de "un partido ordenado", en el que las discrepancias se expresen en el ámbito orgánico y no en los medios de comunicación. El dirigente socialista asegura que en su ejecutiva el relevo generacional está garantizado y no será tan traumático como el último.Pregunta. Ha dicho a su ejecutiva que la prioridad es recuperar el pulso social ¿Cómo lo hará?

Respuesta. Hay dos líneas de actuación que se tienen que poner en marcha con tranquilidad. La primera es iniciar la vinculación de la dirección política con la sociedad valenciana, primero con las fuerzas políticas, pero también con las sindicales y las empresariales. Queremos establecer canales de comunicación fluidos. La segunda es la acción del partido, a través de los secretarios de área, para articular propuestas políticas de acuerdo con agentes sociales y ciudadanía. Ahí tienen un papel importante la coordinación del vicesecretario José Luis Ábalos y Francesc Baixauli, que debe empezar a preparar tres grandes conferencias políticas.

P. ¿En qué se diferencia esta iniciativa de lo que durante el mandato de Joan Romero se denominó Foro siglo XXI?

R. Fue el embrión de esta iniciativa. Foro XXI se hizo para articular una propuesta política de futuro vinculada a sectores sociales, pero desde un punto de vista personal, con documentos base elaborados por personas que no eran del partido. Esto de ahora es más amplio. Con un esquema similar al de Foro XXI en cuanto a los temas y cómo enfocarlos, ahora queremos contar desde el primer momento con organizaciones y entidades que ya están trabajando para mejorar esta sociedad. Se trata de buscar la implicación con los agentes sociales tras lograr su confianza.

P. ¿Cuál es su agenda política?

R. La agenda política de Zaplana es vieja. Mantiene temas abiertos desde hace mucho tiempo sin darles concreción. Queremos transmitir a la ciudadanía que tenemos voluntad de solucionar los temas que podamos de esa agenda vieja, pero queremos incluir cuestiones nuevas en la agenda política. Pretendemos que el PSPV recupere la iniciativa política, que ahora no la tiene. Por ejemplo, en educación la agenda de Zaplana incluye acabar el mapa escolar pero hay otros temas que tan preocupantes para los ciudadanos como ese: la estabilidad del profesorado, su cualificación, etc. Son problemas que se han dejado de lado.

P. ¿Qué temas de esa agenda vieja pueden tener solución?

R. Hay dos temas que se deberían cerrar en un sentido u otro. La reforma del Estatut no se puede dejar pendiente ni un minuto más. Creo que es una cuestión que no interesa a los ciudadanos pero que puede afectar al futuro de la dinámica política de la Comunidad Valenciana. Hay que cerrarlo. El otro es el asunto de la Acadèmia Valenciana de la Llengua. Siendo un tema de agenda vieja, queremos incorporarlo a las cuestiones de la agenda nueva con la consecución de un gran pacto por la lengua. Si Zaplana apuesta claramente por la recuperación de nuestra lengua debe hacer lo posible para cerrar esa cuestión de la Acadèmia dentro de un paquete global. La composición de la Acadèmia no preocupa a la gente de la calle, a los ciudadanos les preocupa que no haya líneas de valenciano suficientes en la escuela donde quieren llevar a sus hijos, les preocupa que los profesores en valenciano esten cualificados, les preocupan esas cuestiones que, por otro lado, serán las que garanticen el futuro del valenciano. Hay otra cuestión que pensaba que no estaba en la agenda vieja de Zaplana y que ahora parece que sí que está: la fusión de cajas de ahorro. Creo que tampoco preocupa a la sociedad, pero el Consell lo ha puesto encima de la mesa y ahora hay que darle una salida, en positivo o en negativo. No estamos cerrados a nada, pero creo que deberían aparcar ese tema.

P. Defiende la escuela pública, sin embargo su partido ha perdido el contacto con los docentes.

R. Hemos perdido el contacto durante mucho tiempo y, seguramente, hemos dado la espalda a un colectivo básico en el sostenimiento de la escuela pública. Debemos verlos de nuevo como un elemento central y articular propuestas que garanticen el futuro de la escuela pública y que la hagan competitiva respecto a la privada.

P. ¿Cuáles son sus propuestas en materia de sanidad?

R. El PP ha creado un clima de incertidumbre insostenible en el sector con su voluntad de hacer negocio con todas las cosas. Han dado pasos hacia la privatización, mientras aparentan defender el sistema público. No debemos descartar nada respecto a las formas de gestión para que la sanidad pública sea competitiva respecto a la privada, pero respetando un sistema que garantiza la atención a todos.

P. ¿Dónde está la principal debilidad del gobierno Zaplana?

R. Superada una primera etapa, donde generó un clima de ilusión vinculado a macroproyectos, ahora agotada, pierde fuerza su capacidad de liderar nada. Además, ahora hay conciencia de que esos macroproyectos han sido a costa de cosas importantes en la vida diaria de los ciudadanos, como la prestación de los servicios sanitarios y educativos. Se ha aprovechado mal una buena coyuntura económica.

P. ¿Ya ha confeccionado su gobierno en la sombra?

R. Está hecho prácticamente, con la ejecutiva del PSPV y la dirección del grupo parlamentario.

P. ¿Qué puntales lo sostienen?

R. El fundamental es el de la vicesecretaría que coordina la acción de gobierno y da sentido a las áreas. Luego hay una serie de áreas muy importantes, la de Acción Política y Electoral, la de Comunicación e Innovación en primer lugar y detrás las de Educación, Sanidad y Política Económica.

P. ¿Qué relación mantendrá con el resto de la izquierda?

R. Este país no puede tener un gobierno progresista sin el PSPV y, a la vez, hay otras fuerzas políticas que pueden hacer posible que el PSPV gobierne. Mi voluntad es hacer una ronda de contactos con Nova Esquerra, que está coaligado, Esquerra Unida, el Bloc y Unión Valenciana. Mi voluntad es la de poner en común aquello que se pueda. Sin un nivel de interlocución claro será difícil llegar a acuerdos.

P. ¿Porqué muestra interés en recuperar el contacto con UV?

R. Unión Valenciana ha iniciado una línea de actuación política desde la que puede realizar su aportación a un gobierno de progreso e incorporarse a él.

P. En su proyecto qué papel tiene el valencianismo.

R. Debemos recuperar el punto de centralidad que teníamos a principios de los ochenta, de defensa del hecho diferencial valenciano sin generar un sentimiento de agresión en quienes entienden el Estado de otra manera. Habría que hacer algo similar para recuperar la mayoría social y la confianza de que sabemos defender lo propio. Si somos capaces de generar iniciativas políticas seremos tenidos en cuenta en el resto del Estado.

P. Relacionando valencianismo y reforma del Estatuto. ¿Es partidario de que el presidente de la Generalitat pueda disolver las Cortes?

R. Siendo importante, no es lo más importante. La capacidad de disolución da idea de mayor autonomía. Creo que sería bueno y así voy a trasladarlo a la ejecutiva federal. Si Zaplana puede convencer a su dirección estatal en esta cuestión, la nuestra no estará en contra, aunque creo que eso no está en la cabeza ni del PP ni del PSOE.

P. ¿Cómo piensa abordar el proceso de primarias?

R. Hay que delimitar los procesos y su finalidad. Las primarias son para designar candidatos y yo me presentaré si he logrado una referencia social suficiente para ser elegido [por la militancia]. Si se presenta alguien más, bien; si no, será un proceso tranquilo vinculado a la idea de ganar unas elecciones.