Un mendigo acusado de matar a otro afirma que lo halló muerto
Santiago L. R., un indigente de 33 años acusado de golpear por la espalda y arrojar al río Manzanares al también mendigo Cristóbal G. M., lo que le causó la muerte por ahogamiento, declaró ayer en la Audiencia Provincial de Madrid. El acusado aseguró que no cometió el crimen que se le imputa y que cuando encontró a la víctima ya estaba muerta. Los hechos ocurrieron el 27 de julio del año pasado en un puente cerca del nudo sur de la M-30. En la Sección Primera comenzó así el juicio con jurado popular contra Santiago L. R., para quien la fiscalía solicita 16 años de cárcel por un delito de asesinato. En su escrito provisional la defensa argumenta que los hechos constituyen una imprudencia temeraria con resultado de muerte, y que, por tanto, sólo cabe imponerle una pena de tres años de cárcel. La abogada del acusado, Francisca Villalba, anunció ayer, sin embargo, que modificará el escrito y pedirá la absolución para el detenido porque "es inocente".
En su comparecencia, Santiago L. R. cambió completamente la declaración que había hecho ante el juez de guardia. Según sus primeras versiones, golpeó por la espalda y sin intención a Cristóbal G. M., supuestamente porque éste pretendía robarle una bicicleta. Ayer dijo que no conocía a la víctima y que el día de los hechos caminaba cerca del puente y vio un cuerpo a lo lejos. "Tenía una parte en el agua, y, como no se movía, pensé que estaba muerto. Entonces fui a buscar una ambulancia en la M-30", señaló. Santiago López Ruiz aseguró que en un primer momento se declaró culpable del asesinato porque se sintió presionado por la policía "y tenía miedo". El acusado insistió en que no mató a Cristóbal G. M.
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