Videojuegos, torturas y derechos del niño
A través de Amnistía Internacional me he enterado de que en el mercado hay unos videojuegos y juguetes, fácilmente accesibles a los menores de edad, que inducen a cometer violaciones de derechos humanos: torturas, matanzas, actitudes sexistas, racistas, etcétera. Que yo sepa no hay ninguna legislación de ámbito nacional o autonómico sobre este tema. Considero del todo imprescindible promover una legislación de este tipo, de acuerdo con la Convención de los Derechos del Niño y la Declaración Universal de los Derechos Humanos.- Maria Teresa Lladó Badía. Barcelona.
Esto es lo que hay
Barcelona, 21 de septiembre, 17.15 horas. Balmes / Rosselló. Una dotación de la Guardia Urbana me requiere a que pare. Cuando lo hago, el agente 19.382 me dice: "¿Sabe usted que hace ocho meses que tenía que haber cambiado la placa del ciclomotor?". "No", le contesto. "Su obligación es saberlo y, si no, vaya usted cada día a la plaza de Sant Jaume a leer el Boletín del Ayuntamiento", me dice. "Oiga agente", le respondo, "tengo mucho trabajo para ir cada día a la plaza de Sant Jaume; supongo que habrán ustedes enviado una notificación a mi domicilio". "No estamos obligados a ello, lea usted el periódico, escuche la radio. Su vehículo queda inmovilizado. Esto es lo que hay", concluye.22 de septiembre, día sin coches... y ¡sin ciclomotor! Felicidades, agente 19.382. Felicidades, alcalde: un voto menos, y van... Cumpliré con los trámites, pero vayan pensando en mejorar el sistema de notificaciones, porque nadie lee cada día el BOE, el DOG, el BOP, el Boletín del Ayuntamiento, etcétera.- Josep Coscojuela López. Barcelona.
'Play back'
Ya sé que hablar de Mónica Naranjo con lo que cae por el mundo es un poco frívolo, pero la crítica que hizo Luis Hidalgo la podría dar por buena si no fuese porque se olvidó de comentar un pequeño detalle, que cantó en play back . En una canción se le cayó el micrófono al suelo y su voz siguió cantando. ¿Magia?, ¿cómo es posible que se pase esto por alto en su crítica? Todos los que estabamos allí lo vimos. Esto es algo que no se puede tolerar, aunque no lo usase en todas las canciones, y que mi diario debería denunciar. Por no hablar del fracaso de asistencia y del penoso montaje escénico.- José Antonio Muñoz Pineda. Barcelona.
