Varios detenidos regresaron desde Hispanoamérica durante la tregua

Las últimas operaciones contra ETA desarrolladas en el sur de Francia por la Policía francesa, en colaboración con la Guardia Civil, han puesto de relieve que la dirección de la banda terrorista ha recuperado para su actividad violenta a varios miembros históricos de esa organización que se encontraban huidos en países de América Latina.Durante la tregua indefinida, iniciada el 16 de septiembre de 1998 y terminada el 3 de diciembre de 1999, los servicios de seguridad indicaron que la cúpula de ETA había ordenado que se incorporasen a las tareas terroristas a varios etarras con experiencia que residían en Hispanoamérica. La detención de Rosario Delgado Iriondo apunta a que esas sospechas estaban fundamentadas. Esta terrorista, a la que se atribuyen 16 atentados, residió a principios de los años 90 en Uruguay, donde se dedicó a crear una red de restaurantes vascos en los que pudieran trabajabar otros huidos de ETA. Uruguay ordenó su expulsión en 1994, y la policía cree que pudo huir a Argentina o Brasil.

José Luis Turrillas Aranzeta, Peputo, es otro de los detenidos que responde a esas misma características de veterano militante etarra, en su caso residente en México durante años, y reincorporado en Francia a la actividad terrorista. También Ángel Pikabea Ugalde, arrestado el pasado sábado, residió algunos años en México, aunque en su caso el regreso a Francia se había producido hace ya tiempo, probablemente en 1995, para encargarse de distribuir las armas y explosivos a los comandos de ETA.