Decomisado en Sydney un alijo de hormonas a un técnico de Uzbekistán

Los servicios aduaneros australianos se incautaron ayer en el aeropuerto de Sydney de un primer alijo de sustancias dopantes: una pequeña cantidad de hormonas del crecimiento que portaba en su equipaje un integrante del equipo olímpico de Uzbekistán. "Se trata de un responsable del equipo, no un deportista. La sustancia incautada parece hormona del crecimiento. Es una pequeña cantidad, aunque la investigación prosigue", precisó Leon Beddington, portavoz de los servicios aduaneros australianos.Las autoridades australianas se negaron a identificar al representante de Uzbekistán, que podría tratarse de un entrenador y al que se le ha retirado su acreditación. Las leyes australianas incluyen la hormona del crecimiento en el grupo de sustancias dopantes más perseguidas, y su introducción ilegal en el país puede acarrear penas de hasta cinco años de cárcel y 11 millones de pesetas.

El COI, mientras tanto, ya ha empezado a realizar las primeras pruebas de dopaje entre los deportistas que tomarán parte en los Juegos, según anunció ayer el director de su Comisión Médica, el doctor Patrick Schamasch. "Hemos hecho 20 controles de EPO y 40 análisis de orina dentro de las pruebas que se van a llevar a cabo fuera de la competición. Los resultados todavía no se conocen", afirmó Schamasch. "Conoceremos los resultados dentro de poco, pero por ahora no hemos encontrado nada extraño. Ojalá siga así", añadió.

El COI va a hacer 3.200 controles durante los Juegos: 400 de EPO, 400 de orina por sorpresa, 400 de orina para el test de EPO y 2.000 en competición.