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Liberada una mujer tras permanecer cuatro años secuestrada en Peligros

,Una joven de 25 años fue liberada ayer en Peligros (Granada) por la Guardia Civil después de pasar cuatro años secuestrada por una pareja que la obligaba a prostituirse con amenazas y agresiones y que, en ocasiones, la ataba con una cadena de acero a una columna para coaccionarla, informó ayer la Guardia Civil. La actuación de los agentes fue facilitada por un vecino de la víctima.

Desaparición

La liberación se produjo el sábado después de que un vecino avisara a la Guardia Civil tras oír gritos de la joven, que aprovechó la ausencia de sus captores para pedir auxilio y tratar de cortar con un hacha la cadena con la que estaba atada.Según la Guardia Civil, la pareja, con un bebé y con la joven secuestrada, se trasladó en marzo pasado hasta Peligros, donde alquiló un bajo con la intención de abrir una tienda de golosinas, pero que finalmente transformaron en una vivienda cuyas condiciones eran "infrahumanas".

Desde su llegada a Peligros, la joven fue obligada a prostituirse en un club de Guadix y, luego, a partir de julio, en las inmediaciones del recinto ferial de Granada.

Los tres días previos a su liberación, la joven cuya identidad no ha sido facilitada, fue encadenada del cuello a la columna de la vivienda donde ayer fue encontrada por agentes de la Guardia Civil que al llegar a los alrededores de la casa detuvieron a sus dos captores, Rafael A.M. de 43 años y con antecedentes por un hecho similar con una ciudadana marroquí, y Encarnación R.M. de 21 años, también con antecedentes.

Ambos están acusados de detención ilegal, coacciones lesiones y de un delito contra la libertad sexual, mientras que el hijo del los detenidos ha sido entregado a sus abuelos paternos.

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También en Granada, los padres de María Teresa Fernández Martín, de 18 años, han presentado una denuncia por la desaparición de su hija la noche del viernes, cerca de una parada de autobús del centro de Motril, donde había quedado con un grupo de amigos, a los que no llegó a ver. María Teresa es de pelo rubio, mide 1.70, tiene un lunar en la parte izquierda de la frente y el día de su desaparición vestía pantalón largo burdeos y una camiseta azul marino de tirantes

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