El puerto de Castellón trata de cerrar su crisis con un nuevo director

El consejo de administración de la Autoridad Portuaria de Castellón nombró ayer por unanimidad a Roberto Arzo director general del Puerto, en sustitución de Francisco Franch, que fue destituido a finales de junio. Enfrentamientos personales en la dirección del puerto relacionados con la adjudicación de nuevos locales en el muelle de Costa, provocaron entonces la mayor crisis de esta institución, que ahora se trata de solventar con el ascenso de Arzo, hasta el momento director de Explotación.

Arzo aseguró que el principal de sus retos es la ampliación del puerto. Además, quiso destacar la importancia del tan polémico plan especial, que incluye la construcción de un gran edificio para albergar multicines y restaurantes de comida rápida, ya que considera que "es una herramienta esencial de ordenación que abre posibilidades para la concesión de licencias de obra y actividad en el Puerto de Castellón". Roberto Arzo, de 40 años, es ingeniero de Caminos, Canales y Puertos. En 1997 ingresó en la Autoridad Portuaria de Castellón y desde enero de 1999 era director de Explotación.El nuevo director general tendrá que luchar con la sombra de Francisco Franch, que fue cesado en junio por 20 votos a favor, un voto en contra y una abstención. El presidente de la Autoridad Portuaria, Jaime Babiloni, alegó entonces falta de confianza en Franch, un ingeniero de caminos nombrado en septiembre de 1995, poco antes de la primera victoria electoral del PP. Babiloni esgrimió contra Franch la concesión de un local en la nueva zona lúdica del Muelle de Costa, por un canon anual de 1.166.000 pesetas. La explotación de dicho bar recayó paradójicamente en María Nieves Peris, la ex-secretaria del gabinete profesional del propio Babiloni y ésta recurrió a la mujer de Franch para constituir una comunidad de bienes, sociedad que luego se deshizo.

Además del nuevo nombramiento, el consejo de administración de la Autoridad Portuaria trató ayer otro temas como la concesión a la Viuda de Enrique Gimeno de un terreno de 18.000 metros cuadrados para la construcción de un almacén de 7.000 metros cuadrados, así como la concesión de otro terreno de 6.000 metros cuadrados en el Muelle de la Cerámica a la empresa consignataria Contoport para importar mercancía.