Fernández rechaza un secretario general con apoyo menor del 50%
Matilde Fernández, la candidata del sector guerrista a la secretaría general del PSOE, desmintió ayer al presidente de la gestora del partido, Manuel Chaves, quien el día anterior había opinado que no es necesario que el futuro líder sea elegido con más del 50% de los votos."Creo que no lo entenderían ni los militantes socialistas ni el conjunto de los ciudadanos españoles", declaró Fernández en Santiago de Compostela, el mismo lugar donde Chaves había expresado su opinión, 24 horas antes, y en pleno debate sobre si habrá segunda vuelta de votaciones para la designación. La elección de un líder con una mayoría tan exigua -Chaves habló incluso "del 40 ó el 44%"- supondría, según Fernández, romper con "la cultura del partido". La ex ministra de Asuntos Sociales recordó que el año pasado, tras el congreso de la federación valenciana del PSOE, la ejecutiva que entonces encabezaba Joaquín Almunia decidió disolver la dirección regional porque sólo había recibido un apoyo del 50%.
Fernández se mostró de acuerdo con las interpretaciones que apuntan a que Chaves estaba insinuando su postura contraria a celebrar una segunda vuelta si ninguno de los candidatos a la secretaría general obtiene la mayoría absoluta en la primera votación.En todo caso, la ex ministra de Asuntos Sociales apuntó que la posición de Chaves no tiene por qué coincidir con la de todos los miembros de la gestora, que se reunirá el próximo lunes para debatir el reglamento del congreso. Fernández recordó, además, que, incluso por encima de lo que acuerde la gestora, la última palabra sobre el sistema de votaciones la tendrán los cerca de 1.000 delegados al congreso.
Responsabilidad
La candidata guerrista apeló al "sentido de la responsabilidad" de los dirigentes del partido para que la pugna entre los cuatro aspirantes a la secretaría general se desarrolle con limpieza. "Espero que a última hora", dijo, "nadie se saque un conejo de la chistera.Confío en que funcione la lógica democrática".Convencida de que habrá dos vueltas, Fernández anunció que si ella es la más votada en la primera, ofrecerá a los demás candidatos formar una ejecutiva "reducida y homogénea". En caso de ser ella la derrotada, anunció que negociará con los demás a partir de sus propuestas políticas. Pero la fidelidad a los principios socialdemócratas que proclaman mantener los guerristas es innegociable, según Fernández. "Creo en el socialismo democrático y de este tren nadie me va a apear", sentenció.
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