Barça y Juventus, en semifinales

Italia-España, Juventus-Barça, Zidane-Figo. 46 de los 88 jugadores semifinalistas de Italia, Portugal, Holanda y Francia pertenecen a las dos mejores ligas continentales y a dos de sus clubes más significativos, que ejercen una influencia económica y futbolística determinante. Ambos disponen de los dos futbolistas más acreditados del torneo (incluso del mundo), Figo y Zidane, y comparten idéntica decepción: ni Juventus ni Barcelona han conseguido esta temporada pasada ningún título, pero ello no ha mermado la competitividad de sus futbolistas en sus respectivas selecciones. España sigue siendo un territorio de los clubes, con resultados espléndidos en los últimos años, que no acaba de contagiar a la selección nacional, a pesar de contar con futbolistas de reconocido prestigio. España vive una contradicción. 14 futbolistas de su Liga (8 del Barça, 1 de la Real, 1 del Oviedo, 2 del Deportivo y 2 del Madrid) disputan las semifinales del torneo, que la selección no alcanzó. - Autocracia italiana. 33 de los 88 futbolistas que conforman las cuatro selecciones semifinalistas de la Eurocopa jugaron la pasada temporada en la Liga italiana. Hay un dato previo: los 22 seleccionados de Dino Zoff juegan en el calcio, un campeonato importador y que limita la exportación nacional a jugadores muy secundarios. Italia cultiva las figuras, aunque a veces las depreda con poco juicio. Es el caso de Zidane, no siempre bien entendido en el Juventus, que ilustra su página web con una fotografía del holandés Davids. Todos los equipos semifinalistas tienen jugadores de la Liga italiana. Couto, Paulo Sousa, Rui Costa y Sergio Conceiçao en Portugal; Blanc, Candela, Thuram y Zidane en Francia; Van der Sar, Davids, y Seedorf en Holanda.

- España o el vigor de los clubes. La liga española es el segundo punto de referencia de la Eurocopa, que compensa la ausencia de España en semifinales con la colonia holandesa que milita en el Barça. 14 futbolistas en las semifinales del torneo atestiguan el vigor de los clubes españoles frente a una selección nacional demasiado errática históricamente en su estilo y poco documentada en las grandes citas. El fútbol español está representado en tres selecciones, bajo la descomunal figura del portugués Luis Figo. Junto a él, la selección portuguesa dispone de Vitor Baia (cedido por el Barça al Oporto), Sa Pinto (Real Sociedad), Paulo Bento (Oviedo) y Pauleta (Deportivo). Francia es territorio madridista con Anelka y Karembeu, dos jugadores en entredicho que pueden abandonar el fútbol español la próxima temporada. La reserva española es holandesa, por obra y gracia de Van Gaal. Hasta seis futbolistas visten de azulgrana, junto al deportivista Makaay.

- Inglaterra, en dos direcciones. Inglaterra, fracasada en la Eurocopa, convive con una doble personalidad. La selección se resiste al cambio que sus clubes proponen. El Chelsea ha sido al abanderado del cambio de estilo y de filosofía, al amparo, sobre todo, del fútbol francés y del italiano. El Arsenal ha seguido su ejemplo. Así, 12 futbolistas de la Premier League disputan las semifinales de la Eurocopa, la mitad de ellos franceses, el oráculo del nuevo fútbol inglés. La rudimentaria Premier Legue puede observar a futbolistas exquisitos como Bergkamp, Overmars o Henry, todos en el Arsenal, junto a acreditados profesionales como Desailly, Leboef y Deschamps, del Chelsea, o el holandés Stam (Manchester United). Incluso Portugal tiene un futbolista en las islas británicas, el defensa del Everton Abel Xavier. Holanda y Francia representan mejor que la selección inglesa el futuro planificado por los clubes ingleses.

- Juventus contra Barça. El Juventus y el Barcelona son los clubes de la Eurocopa. 18 de sus jugadores (10 del equipo italiano, ocho del español) están en semifinales y aspiran al título europeo. Tienen a los mejores jugadores del torneo: Zidane y Figo, rodeados de extraordinarios futbolistas. El Juventus cuenta con el portero holandés Van der Sar y el centrocampista Davids, además de los nacionales Inzaghi, Zambrotta, Del Piero, o los defensas Iuliano, Pessotto o Ferrara. Conte padeció la ira de Hagi y ve la Eurocopa con el tobillo escayolado.

El Barça es Figo y el clan holandés. El jugador portugés no ha variado su personalidad; con su selección dispone de la jerarquía y la libertad que Van Gaal le restringió, por mor del tacticismo, en el club azulgrana. Los holandeses también se han transformado. Hay dos ejemplos paradigmáticos: Kluivert y Zenden. El primero ha reivindicado su instinto asesino en cuanto ha contado con la intensidad ofensiva y el acompañamiento necesarios. El extremo, corto de recursos, se ha revelado en su selección como un jugador correcto que cumple con su obligación: procurar el peonaje del equipo.

- Goles españoles. La diferencia entre Italia y España estriba en el gol. 24 de los 79 tantos conseguidos, hasta culminar los cuartos de final, han sido logrados por españoles o jugadores que militan en clubes españoles. Las Ligas italiana e inglesa sólo suman 13 cada una. El acierto de Kluivert (5) y del zaragocista Milosevic (5) tienen mucho que ver en la estadística. La caza del goleador, con resultados diversos, es obsesiva en España.