Arzalluz anuncia la ruptura con Euskal Herritarrok que reclamaban los críticos de su partido

El presidente del PNV, Xabier Arzalluz, confirmó ayer que este partido tiene adoptada la decisión de no colaborar con Euskal Herritarrok (EH) mientras ETA mate o persista la violencia callejera. El lehendakari, Juan José Ibarretxe, y los principales cargos públicos peneuvistas hicieron pública su reclamación de esa ruptura con los radicales tras el último atentado de la organización terrorista el pasado 4 de junio. Esta postura se ha afianzado en la mayoría de la ejecutiva del PNV, aunque no se haya producido un anuncio oficial de la decisión. Arzalluz descartó, sin embargo, romper el diálogo con Herri Batasuna (HB), nucelo duro de EH.La decisión de cortar los pactos con EH que se ha impuesto en la ejecutiva del PNV ha sido esbozada por varios dirigentes en comparecencias públicas, como hizo Arzalluz ayer en una entrevista en la radio pública vasca.

El máximo dirigente del PNV dijo que "cree" que se romperán los acuerdos en todos los ayuntamientos donde hay gobiernos conjuntos con los radicales. Confirmó que ése es el criterio del PNV como partido y confió en que alcaldes y concejales se adaptarán a él. Arzalluz explicó que su partido no considera a HB cómplice de la violencia y que la ruptura viene motivada por el hecho de que la opinión pública sí piensa que existe una relación con ETA y no entiende la actuación conjunta del PNV con los radicales. Abogó por un acuerdo entre todos los partidos, desde el PP hasta HB, y dijo que los intereses electorales lo ha impedido.

La decisión del PNV de romper los pactos con EH ha sido recibida por la plataforma electoral de HB con la acusación al partido de Arzalluz de estarla usando como "cortina de humo" para eludir el fondo del debate. El líder de EH, Arnaldo Otegi, emplazó al PNV a aclarar si apuesta por la autonomía o por la soberanía.