Klara

En estos días pasados los medios de comunicación han ofrecido mucha información sobre el asesinato llevado a cabo por dos adolescentes en la persona de una compañera. Al parecer, el motivo que llevó a esas chicas a cometer un crimen fue realizar una acción que les permitiera ser famosas. Eso lo han conseguido gracias a la colaboración de los medios de comunicación. No es la primera vez que un hecho aislado llevado a cabo por adolescentes es tratado de forma sensacionalista por prensa, radio y televisión, contribuyendo a difundir una imagen muy negativa de este colectivo.Es cierto que algunos jóvenes y adolescentes se ven implicados en actividades violentas y antisociales, al igual que algunos adultos, pero no es menos cierto que la inmensa mayoría de ellos estudian, hacen deporte, se divierten y se esfuerzan por comprender y mejorar este mundo que les ha tocado vivir. La enorme repercusión creada en la opinión pública por el tratamiento mediático ante sucesos de esta índole ha llegado a crear una alarma social que no creemos que responda a la realidad, ni que contribuya en nada a mejorar la adaptación y las condiciones de vida de nuestros jóvenes, sino a aumentar los prejuicios y la estigmatización de quienes bien podrían ser nuestros hijos e hijas.

Analizar y comprender las condiciones de vida de los adolescentes, conocer sus necesidades, sus dificultades y sus problemas es una obligación social que debemos afrontar con seriedad. Divulgar de forma sensacionalista hechos aislados tratando de generalizarlos es algo que deberíamos evitar a toda costa.- Alfredo Oliva Delgado. Vicepresidente de la Asociación Andaluza para la Defensa de la Infancia y la Prevención del Maltrato Infantil. Sevilla.