La Diputación vizcaína amplía a cuatro meses el servicio de 'hondartzainas' en sus playas

Las playas vizcaínas tendrán este verano cuatro meses de servicio de hondartzainas (jóvenes que realizan servicios de vigilancia y ayudan a regular el tráfico) lo que supone 30 días más en relación al pasado año. La Diputación ha decidido que trabajen desde el 1 de junio al 30 de septiembre, aumentará su número hasta 55 y la inversión total subirá un 53%. En el litoral vizcaíno, la temporada de baños se inicia el próximo 10 de junio y en Guipúzcoa, donde la labor que realizan los hondartzainas es cubierta por las respectivas policías locales, comienza el día 13.

Las autoridades vizcaínas se han basado en las encuestas de opinión del pasado año, que valoraban satisfactoriamente la labor de este servicio que complementa el más conocido trabajo de los socorristas. En esos sondeos, cuatro de cada cinco usuarios se mostraban de acuerdo con la necesidad de la presencia de los hondartzainas. "Con el objeto de mejorar la alta valoración que el usuario tiene de este servicio, el Departamento de Medio Ambiente y Acción Territorial ha decidido reforzarlo, tanto en cuanto a número de vigilantes, como en su formación, funciones y ordenación de su trabajo", explicó ayer la titular de esta área en Vizcaya, María Esther Solabarrieta.Serán 55, frente a los 48 del pasado año, los hondartzainas que se encargarán de atender 25 de las 28 playas vizcaínas. La mayoría de ellas tendrán entre una y dos personas, aunque en La Salvaje y Karraspio se elevarán a cuatro, y en La Arena, el enclave más concurrido, con más de 800.000 usuarios de junio a septiembre, alcanzarán hasta diez. Este aumento obliga a incrementar el presupuesto de la Diputación para este servicio, que alcanza los 63,5 millones, frente a los 41,5 del pasado año.

Solabarrieta destacó que estos jóvenes, que han sido elegidos por los ayuntamientos y deben estar en situación de desempleo, trabajarán entre las 10.00 y las 20.00 con presencia en la playa, los aparcamientos, las áreas de picnic y peatonales y zonas de dunas.

La diputada de Medio Ambiente incidió en la necesidad de normas municipales claras sobre lugares de acampada permitida, prácticas nudistas o tenencia de animales en lugares públicos. "Los Ayuntamientos deberán detallar las normas y preceptos que regulan estas actividades", dijo. Recordó que los hondartzainas "no pueden ser considerados policías", por lo que pidió apoyo de los ayuntamientos, las policías municipales o la Ertzaintza.

La Diputación vizcaína ha ofrecido este año cursos de formación a este colectivo de jóvenes, en los que se ha insistido en evitar cualquier discusión con los usuarios o intentar hacer cumplir por la fuerza sus requerimientos. "Se informará [al ciudadano] que, en caso de no corregir su comportamiento, se avisará a la Policía Municipal o a la Ertzaintza". Para este verano los hondartzainas contará con un libro de reclamaciones, otro de incidencias y un tercero de información, en el que se anotarán datos relativos a la ocupación de las playas, banderas, temperatura del agua o climatología, otras de las funciones de este colectivo.

Los hondartzainas son un servicio que sólo existe en Vizcaya. En las playas guipuzcoanas esta labor de vigilancia se realiza a través de las policías locales, que patrullan en verano como por cualquier lugar del municipio. La diputada vizcaína aseguró que la temporada de baños se iniciará el 10 de junio y terminará el 10 de septiembre, mientras que en Guipúzcoa discurrirá entre el 13 de junio y el 15 de septiembre. Solabarrieta dijo que en los próximos años tratarán de que los socorristas ofrezcan servicio también durante cuatro meses.