Un juez ordena que se reabra el caso del incendio del monte Abantos

El titular del Juzgado número 2 de San Lorenzo de El Escorial ha ordenado que se emprendan nuevas investigaciones sobre el incendio que destruyó 450 hectáreas en el monte Abantos, tras un recurso presentado por Jesús Miña, concejal de Izquierda Unida de San Lorenzo. El caso había sido archivado el pasado 24 de enero, tras determinar los informes de la Guardia Civil que el fuego no fue intencionado. Según las pesquisas, un pedazo de una botella de cristal provocó accidentalmente el incendio, que posteriormente paralizó por parte de la Comunidad de Madrid la aprobación de las normas subsidiarias que elaboraba el equipo de gobierno municipal.El portavoz de IU, Jesús Miña, declaró ayer que su grupo político pretende esclarecer el caso y determinar todas las responsabilidades políticas, económicas y penales sobre el mantenimiento del monte y su situación antes de que se desencadenase el devastador fuego del pasado verano.

Además, según publica El Diario del Noroeste, los propietarios del Prado de la Era, en las faldas del monte Abantos, han enviado un escrito al Ayuntamiento y al Gobierno regional en el que comunican que, transcurridos cuatro meses de silencio administrativo sobre el desarrollo urbanístico de la finca, paralizado tras el incendio, se entiende que podrá desarrollarse el proyecto de construcción de 883 viviendas previstas en las normas urbanísticas.

El incendio en el monte Abantos -el mayor de este tipo que se ha registrado en la región en los últimos 10 años- se inició en una rastrojera a las 15.30 del 20 de agosto del año pasado, debido al efecto lupa de un trozo de cristal al recibir los rayos del sol, según la Guardia Civil.

Los bomberos tuvieron que emplear miles de litros de agua para sofocar las llamas, coordinaron un dispositivo de emergencia formado por 1.000 personas, los vuelos de cinco hidroaviones y seis helicópteros y el trabajo de seis máquinas que abrieron cortafuegos. Unas 5.000 personas tuvieron que ser evacuadas de un cámping y tres urbanizaciones ante el peligroso avance del fuego y el humo.

Subasta de pinos quemados

Unos 35.000 pinos resultaron quemados, según estimaciones de la Consejería de Medio Ambiente, que el pasado febrero sacó a subasta pública esta madera en ocho lotes, que finalmente fueron adjudicados a siete empresas por un importe de 43,5 millones. La madera de peor calidad iba destinada a la fabricación de conglomerado, mientras que la mejor sirve para hacer muebles.

El dinero obtenido ha sido distribuido de la siguiente forma: 34 millones para la Comunidad, seis para el Ayuntamiento de San Lorenzo de El Escorial y los tres millones y medio restantes han ido a parar a los bolsillos de los propietarios privados afectados por el siniestro. El presidente regional, Alberto Ruiz-Gallardón, ha prometido invertir 300 millones de pesetas en los próximos tres años para reforestar el monte.