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Un espectáculo de la Escuela Bolera cierra el ciclo de danza de la Fundación Caixa de Terrassa

La Escuela Bolera es el nombre con el que se conoce a la genuina danza clásica española. Nacido en el siglo XVII, este género basado en los ritmos y danzas populares ha ido cayendo en desuso. En la actualidad, sus representantes casi únicos son el Ballet de Cámara Pericet, impulsado por la tercera generación de la familia Pericet que se dedica a la Escuela Bolera. Paradójicamente, el circuito de actuaciones de la compañía se reduce casi en exclusiva a Argentina, país en el que tiene su sede, y sólo en contadas ocasiones recala en España. Mañana actuarán en el Centro Cultural de Caixa Terrassa, como cierre del ciclo de danza de la fundación cultural de esta entidad.

Ángel Pericet, director de la compañía, lamenta: "Nunca he sido profeta en mi tierra". Ésta será su segunda actuación en Cataluña, 47 años después de la primera. "Hace muchos años que vivimos entre España, donde trabajamos muy poco, y Argentina, un país en el que hay un gran interés hacia nuestro baile", señala el director. De hecho, en la actualidad el Ballet de Cámara Pericet cuenta con un bailarín argentino, José Zartmann, además de con tres de los hermanos Pericet: Carmelita, Amparo y el propio Ángel.

Éste se muestra preocupado por la progresiva desaparición de la Escuela Bolera, que, en su opinión, se produce por el desinterés de instituciones, público y, especialmente, bailarines. "Muchos creen que la danza clásica universal es más completa y perfeccionada que la española, pero eso es un error", defiende.

Falta de interés

Para acabar de depurar responsabilidades, señala: "Somos el único lugar del mundo con una danza clásica con sello propio, y los bailarines nos empeñamos en destrozarla". Pericet cree que no se respetan ni los pasos de baile originales ni, en muchos casos, la denominación primitiva de éstos, en castellano, abandonada a favor de la francesa.

En su presentación en Terrassa, el Ballet de Cámara Pericet presentará un programa compuesto, en su primera parte, por cinco bailes emblemáticos de la Escuela Bolera (Olé de la Curra, El Vito, La Maja y el Torero, Panaderos de la Flamenca y Seguidillas manchegas). "Son auténticos documentos. Se conservan sin alteraciones porque nos han llegado a través de nuestro abuelo, Ángel Pericet Carmona", describe el director.

En la segunda parte de su actuación, el Ballet de Cámara interpretará varias coreografías propias, compuestas en su mayoría por Ángel Pericet.

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