La mitad de los juicios de Girona se suspenden al no acudir los testigos

Las incomparecencias de testigos y procesados obligan a suspender entre un 40% y un 50% de los juicios programados en la Audiencia de Girona. Este porcentaje se disparó al 100% durante la jornada de ayer, cuando ni uno de los cuatro juicios previstos pudo celebrarse. Estas cifras, que el presidente de la Sección Tercera, Fernando Lacaba, considera "una barbaridad" ocasionan enormes disfunciones en la maquinaria judicial y policial. El jefe de la región policial de Girona de los Mossos d'Esquadra, Joan Miquel Capell, es partidario de modernizar las declaraciones y recurrir a métodos que no hagan indispensable la presencia física del testigo, como la grabación en vídeo de las declaraciones o la videoconferencia. Además de la pérdida de tiempo para ciudadanos, abogados y policías que cumplen con sus obligaciones, los funcionarios se ven obligados a lidiar con personas que arremeten contra la supuesta inoperancia de la justicia después de comparecer dos o tres veces ante el tribunal por una misma causa.

La incomparecencia de los acusados puede resolverse decretando una orden de búsqueda y captura, siempre que la pena del delito por el que se les acusa lo permita, pero la de los testigos tiene peor remedio. La ley establece tres citaciones y sólo a partir de la última los testigos podrán ser llevados ante el tribunal a la fuerza. Lacaba opina que este sistema debería modificarse, de manera que una sola incomparecencia sin justificar pudiera ser suficiente para mandar a la fuerza pública en busca del declarante. Joan Miquel Capell, menos partidario de medidas punitivas hacia los testigos, asegura que la solución pasa por darles confianza y facilidades, y hacerles ver que son piezas indispensables de la maquinaria judicial.

La comparecencia en los juicios de los agentes de los Mossos d'Esquadra obliga a una compleja planificación de las funciones del cuerpo y no es raro encontrar agentes que han acudido hasta tres veces a los juzgados por un mismo juicio. Los juicios suspendidos acostumbran a ser los que prevén penas más leves para los acusados.