9.300 corredores se enfrentan mañana en la capital a 42.195 metros llenos de cuestas

El Maratón Popular de Madrid sigue imparable. La 23ª edición de mañana, domingo, será la más popular, ya que en la línea de salida habrá 9.300 corredores, frente a los 8.732 del año pasado. También se ha batido el récord de mujeres inscritas, 407; el número de debutantes, 3.184, y la cifra de militares, cerca de 2.000. La organización alentará a los corredores con 10 puntos de animación, 10 de megafonía, 9 de avituallamiento líquido, 7 de esponjas y 5 de duchas. Cuatro millares de voluntarios y 200 masajistas mimarán a los corredores y medio millar de policías vigilarán los cruces.

Este año se ha vuelto a modificar el recorrido desde la glorieta de San Vicente. Los atletas pasarán por el paseo Virgen del Puerto, la Ermita del Santo y subirán el paseo de Pontones para afrontar los últimos tres kilómetros.

Hoy, sábado, los corredores deben comer hidratos de carbono, porque con ellos pueden llenar los depósitos de glucógeno, el combustible que les permitirá superar los momentos más críticos. Mañana, domingo, hay que levantarse tres horas antes de la carrera. Los atletas tienen que estirar y tomar un desayuno ligero dos horas antes de la salida. Lo mejor es desayunar como de costumbre. No hay que excederse ni dejar el estomágo vacío. Algo de fruta, sobre todo manzana, no vendrá nada mal. La organización recomienda llegar a la salida una hora antes. Después de comenzar a correr hay que controlarse y no dejarse llevar por un ritmo veloz.