El nadador que se pasó al fútbol de chiripa

"¿Es cierto que haces 2.000 abdominales diarios?", le preguntó un periodista a Ettien tras un entrenamiento de la plantilla del Levante. "Sí; por la mañana hago 1.000 y por la tarde otros tantos", contestó el futbolista africano (Abidjan, Costa de Marfil, 1979) un tanto sorprendido.Félix Dja Ettien tiene un físico imponente, un amasijo de músculos repartido en 184 centímetros de altura. "Hasta los 17 años hice natación, quizá por eso tengo estas espaldas", dice en tono jocoso este lateral izquierdo del Levante, quien llegó a Valencia hace tres años procedente de un modesto club francés. Ettien llegó al fútbol de chiripa, según cuenta. "Unos amigos me sugirieron que jugara, que tenía condiciones. Comencé tarde pero enseguida me propusieron ir a Japón. Al principio me tomé el fútbol de cachondeo, salía casi todas las noches, pero me di cuenta de que así no iba a ningún sitio. Entonces me puse un poco más serio". Tras su experiencia en Japón le llegó una oferta de Francia. En aquellos tiempos, Ettien jugaba -o lo ponían- de extremo derecho. Desbordaba -más bien arrollaba- a los defensas con su descomunal fuerza. Técnicamente estaba muy verde, pero aun así era un jugador apreciado en su país, internacional en las categorías inferiores. Ricardo Chover, secretario técnico del Levante, se fijó en él y en otro chaval espigado (Keita, actualmente en el Oviedo) durante una Copa de África sub 21. "Me quedé impresionado con su físico. Tenía sólo 17 años y no me lo pensé dos veces. Por poco que mejorara táctica y técnicamente, se podía convertir en un buen jugador", señala Chover.

Ettien se pasó dos temporadas sin apenas jugar. Cuando salía, la grada se mofaba; aquel portento físico resultó ser un extremo trastabillado, sin recursos técnicos. La llegada de Pepe Balaguer al banquillo del Levante hace año y medio resultó determinante en la carrera de Ettien, quien retrasó su posición hasta jugar como lateral. "Todavía estoy en fase de aprendizaje", dice un humilde Ettien, por quien ya se han interesado algunos clubes de Primera, entre ellos el Valencia y el Mallorca. La directiva del Levante le ha sugerido a Ettien que se case con su novia valenciana para de esa forma convertirse en jugador comunitario.