Partidos y sindicatos apuestan por el diálogo social

El diálogo social fue el gran protagonista en las intervenciones de los oradores invitados al congreso de CCOO. El ministro de Trabajo en funciones, Juan Carlos Aparicio, expresó su confianza en los resultados del debate y aseguró que sus conclusiones serán "muy tenidas en cuenta" por el Gobierno. Para Aparicio, el diálogo social no es una alternativa a la negociación política, sino su mejor complemento. Como reto para el futuro próximo, el titular de Trabajo destacó la creación de más y mejor riqueza y empleo.El secretario general de UGT, Cándido Méndez, se dirigió a sus compañeros de Comisiones Obreras con la agenda abierta. Méndez sugirió que las dos centrales deben fijar un encuentro conjunto para después del Congreso y concertar reuniones con el Ejecutivo y con los empresarios.

El líder de UGT avanzó algunas pinceladas de la postura que mantendrá ante el nuevo Ejecutivo: "No hacen falta más modificaciones del mercado laboral que no sean para impedir abusos en la contratación temporal".

Los sindicatos quisieron aprovechar un foro como éste para recordar que el objetivo del pleno empleo sigue vigente. Además de las menciones de Méndez, aludió a este concepto con especial insistencia el secretario general de la Confederación Europea de Sindicatos (CES), el italiano Emilio Gabaglio. Para él, pese a que los debates de la nueva economía lo absorben todo, es necesario volver a hablar de los viejos problemas. De ellos, el principal es la garantía de un trabajo para todos.

El presidente de la Comunidad de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, se sumó también al debate y deseó que el congreso de Comisiones inicie un proceso de modernización del movimiento sindical. Tras reconocer la función de la concertación en el crecimiento del empleo en España, vaticinó que todo lo que ocurra en el congreso del sindicato afectará a la sociedad.