Llach reivindica los Països Catalans con la nueva cantata 'Germanies 2007'

Germanies 2007 es el título del nuevo trabajo que Lluís Llach presentará el próximo 6 de mayo en la plaza de toros de Valencia. Se trata de una cantata para más de doscientos intérpretes con texto de Miquel Martí i Pol que habla sobre el pasado, el presente y el futuro de los Països Catalans. "Siempre se habla de ellos como de algo del pasado, pero tal vez en el 2000 podamos ya desinhibirnos y presentarlo como un fenómeno de futuro y, además, capaz de animar a la gente", explicó Llach.

El estreno de la nueva obra de Llach se realizará en el marco de una jornada reivindicativa organizada por Acció Cultural del País Valencià y la Institución Joan Fuster, y presentada bajo el lema Anem junts per la cultura i pel territori. Además del estreno de Llach, la jornada incluirá una asamblea de concejales de cultura y medio ambiente llegados de más de trescientos ayuntamientos de Valencia, Cataluña, Baleares, Aragón y el sur de Francia. Una manifestación festiva, un concierto de folk y otro de rock completarán los actos. "La idea surge para combatir la desorientación y el desánimo que reina en los Països Catalans", explicó Eliseu Climent, secretario general de Acció Cultural. "Buscamos una respuesta civil para intentar un reagrupamiento moral de nuestra sociedad".La actuación de Lluís Llach, punto central del acto, significará el estreno absoluto de su cantata Germanies 2007, escrita especialmente para la ocasión, que por ahora no volverá a representarse en ningún otro escenario. A pesar de ello, Llach empleará una parte del verano en grabarla y, si se cumplen las expectativas, el disco estará en las tiendas antes de las próximas navidades. "Hemos querido reflejar cómo ha de ser el nacionalismo a partir de ahora. En este momento nos tenemos que replantear seriamente el nacionalismo progresista, o cambian esos planteamientos o el futuro no será precisamente bueno", explicó el compositor y cantante ampurdanés.

En el aspecto musical Germanies 2007 es, posiblemente, una de las obras más ambiciosas de Llach: 3 solistas, 200 cantantes infantiles y 12 músicos. "Para evocar el pasado he buscado una voz de contratenor y la he encontrado en Xavier Torra. El presente seré yo. El futuro inmediato está representado por la diversidad cultural con la voz de Lucrecia, y el mañana por la presencia de varios coros de niños".