Un libro recopila los monólogos televisivos de Andreu Buenafuente

Se acerca Sant Jordi. Que el día del libro y la rosa está próximo se nota en el calendario. Pero también en que acaba de aparecer una obra firmada por Andreu Buenafuente, algo que suele suceder por estas fechas desde que el humorista ha saltado a la fama, o sea, desde que hace televisión. El año pasado fue Sense llibre, y hace tres el libro sobre el programa de radio de El Terrat. El de ahora se titula Digue'm agosarat y es una recopilación de sus monólogos en La cosa nostra.

Buenafuente presentó ayer a la prensa Digue'm agosarat (Columna) junto a los otros tres autores del libro: Xavier Cassadó, David Escardó y Carles Torras, del equipo de guionistas del programa de TV-3. El libro incluye 62 monólogos elegidos entre los que el showman viene interpretando desde hace un año en La cosa nostra, así como uno inédito, titulado El dia de la mona, que tiene previsto llevar a la pantalla el lunes de Pascua. Buenafuente calificó Digue'm agosarat de "libro-fiesta" y destacó que su finalidad es entretener al lector y conectar con los seguidores de La cosa nostra, al margen del ámbito televisivo.El humorista explicó que la idea de la publicación del libro surgió a la vista de la buena acogida que tienen los monólogos "entre la gente de la calle". Eso llevó al equipo del programa a pensar que "la locura, el esfuerzo y el trabajo" que significan escribir cuatro días a la semana varios folios que se convierten en los 10 minutos de reflexiones que vierte Buenafuente -todas las noches de lunes a jueves en TV-3- sobre la vida cotidiana y la actualidad merecían una compensación. La recompensa es el libro, un producto de consumo cultural no tan efímero como la televisión. "La televisión, como la radio", justificó Buenafuente, "se fabrica para morir cuando acaban los programas. Y, la verdad, nos sabía mal que eso sucediera, sobre todo porque en nuestro trabajo el guión es importantísimo".

Aseguró el humorista que es consciente de que Digue'm agosarat no es competencia para las novedades de literatura catalana, ni lo pretende -"tenemos claro que no somos escritores, sino humoristas"-, y lamentó la polémica que todos los años por estas fechas se plantea sobre el éxito de ventas de los libros llamados mediáticos, es decir, los firmados por famosos televisivos.

Es una incógnita si los monólogos leídos causarán la misma hilaridad en el lector que los interpretados provocan en el telespectador. Para intentar que los escritos transmitan idéntica frescura que los emitidos, la transcripción se ha realizado del monólogo tal cual ha sido dicho, no del guión, ya que Buenafuente acostumbra a improvisar, y mucho.