El gran duelo latino

Todo el equipo español, desde el seleccionador hasta el último de los jugadores, dedicó el día de ayer a proclamar el interés del duelo frente a Italia, el viejo rival latino. Camacho y sus futbolistas recordaron el prestigio del fútbol italiano y la necesidad que tiene la selección española de retomar su excelente nivel tras la derrota frente a Argentina. El técnico llegó a molestarse con la terquedad de la prensa en referirse a la fatiga de los futbolistas. "Los rivales también están cansados. Las excusas están a la orden del día, pero la realidad es diferente: hay que jugar".En la misma onda estuvieron Raúl y Guardiola, líderes de un equipo que sólo ha perdido un encuentro durante la época Camacho. Fue precisamente frente a Italia donde se generó un entusiasmo en torno a la selección que no ha cesado hasta ahora. En su segundo partido como seleccionador, Camacho tuvo que armar un equipo que levantó muchas sospechas. Se venía de un Mundial decepcionante y faltaban internacionales como Hierro, Guardiola, Kiko o Alfonso. Varios de los jugadores eran novatos en la selección. Dominó el pesimismo en torno al partido, que tuvo un desarrollo inesperado: España empató con Italia, pero jugó con clase, soltura y atrevimiento.

El técnico se refirió al cambio que se ha producido desde el anterior enfrentamiento con Italia. "Entonces pasábamos por un etapa de intranquilidad, especialmente por lo que ocurrió en el Mundial de Francia. Ahora tenemos confianza en nuestro juego. Otra cosa es que ganemos o no. Es algo que no me preocupa demasiado. Italia tiene un excelente equipo. Seguramente será un encuentro igualado. Sólo me preo-cuparía sin nos pasaran por encima", declaró Camacho, que no dio pistas sobre la alineación.

Tanto Raúl como Guardiola abundaron en el interés del encuentro. Como siempre, Guardiola mostró su admiración por el delantero. Lo hizo en una respuesta a una de las muchas preguntas laterales al encuentro. Raúl había declarado minutos antes que "los árbitros españoles son muy buenos". Interrogado sobre el mismo asunto, Guardiola dijo que Raúl era el mejor futbolista español y que nunca desmentiría al mejor. Sobre el partido de Montjuïc, Raúl volvió a negar el cansancio como excusa y pronosticó un duelo difícil. Recordó el partido de Salerno como un punto de inflexión en el juego de la selección española y dio por seguro el apoyo del público. "Hace cuatro años jugamos la final del Campeonato de Europa sub 21 y la gente se volcó con nosotros". Camacho resolvió esta cuestión a su manera: "No sé porque tanta preocupación. Juega España y punto".

Guardiola se refirió al buen gusto de Barcelona por el fútbol. "Creo que nos recibirán bien porque se trata de un partido atractivo, con dos selecciones muy interesantes. Cataluña ama el buen fútbol y me parece que hoy se da una buena excusa para subir a Montjuïc". Sobre su relación con Camacho, que le ha expresado su apoyo en los momentos más difíciles del campeonato, Guardiola fue contundente. "Le estoy inmensamente agradecido. Cuando uno está olvidado, por lesión o por cualquier otra cosa, agradece gestos como el del seleccionador. Camacho me ha ganado, espero no defraudarle".

Todos los jugadores españoles señalaron que lo normal es un partido en el que España lleve la iniciativa. "Ellos probablemente nos esperarán", dijo Guardiola. Es el estilo de Italia, un equipo que atraviesa momentos difíciles. Para su seleccionador, Dino Zoff, se trata de un choque importante. Cuestionado como está por el mal juego de su equipo y por unos resultados mediocres, Zoff necesita una buena prestación de sus jugadores. No le faltan futbolistas solventes y nadie duda de que son muy capaces de comprometer seriamente al equipo español, pero también parece evidente que el fútbol italiano necesita de una revisión de sus principios. Y Zoff no parece precisamente un visionario para dar el vuelco.

España: Molina; Velasco, Abelardo, Paco, Aranzabal; Etxeberría, Guardiola, Valerón, Fran; Raúl y Urzaiz.

Italia: Buffon; Negro, Cannavaro, Fuser, Maldini; Albertini, Tacchinardi, Pessotto, Fiore; Del Piero y Filippo Inzaghi.