El Celta confía en sus posibilidades

XOSÉ HERMIDA Por segunda temporada consecutiva, el Celta tiene a su alcance las semifinales de la Copa de la UEFA, un logro que ya apenas llama la atención pero que no deja de tener su trascendencia histórica para un club recién llegado a la élite. El Celta apurará sus opciones esta noche en el Felix Bollaert de Lens (20,45 horas), un estadio temible por la pasión con que se viven los partidos desde la grada y donde ya fracasó el Atlético de Madrid hace un par de semanas. El empate sin goles del partido de ida tiñe el duelo de incertidumbre. El Celta sabe que el fútbol siempre está de su lado, pero necesita poner remedio de una vez a su endémica falta de puntería.

La expedición gallega llegó ayer al norte de Francia rumiando todavía su mala suerte en el último encuentro de Liga. Frente al Alavés, regresó el Celta del fútbol exquisito y vertiginoso, pero, como unos días antes frente al Lens y como tantas veces a lo largo de esta campaña, los vigueses estropearon su exhibición por una desesperante ausencia de pegada. Víctor Fernández, el técnico del cuadro celeste, es un hombre preso de una paradoja: le sobra confianza en las posibilidades futbolísticas de su equipo, pero le abruma la inseguridad por su impotencia ante la portería.

"Hubiese sido mejor ganar en Balaídos, pero un empate sin goles tampoco es un mal resultado", argumentaba ayer Mostovoi. Ese marcador del partido de ida siembra toda clase de incógnitas sobre el perfil de duelo de esta noche. ¿Los franceses saldrán desmelenados o preferirán esperar al Celta, un equipo casi siempre volcado al ataque?. Su entrenador, François Brisson, se salió por peteneras cuando se le planteó la cuestión expresamente. "Lo importante no es atacar o defender, lo importante es pasar la eliminatoria", fue su perogrullesca respuesta. Algo más concreto, el centrocampista Blanchard anticipó que una de las claves para el Lens será conseguir un gol en los primeros minutos.

Motivos de preocupación

Víctor Fernández tampoco dio muchas pistas sobre sus planes. Espera que el Lens, como hace habitualmente, lleve la presión sobre el contrario hasta muy arriba, lo que dificultará al conjunto gallego el manejo de la pelota. El Celta suele ser fiel a sus principios futbolísticos y éstos le impelen a tomar la iniciativa de los partidos. Pero esta vez, Víctor ha anticipado que prefiere no obsesionarse con buscar el gol desde el primer momento. Hasta el presidente, Horacio Gómez, se abonó a esa estrategia cautelosa. "Lo más importante es aguantar la primera media hora", afirmó.

En el Celta hay dos grandes motivos de preocupación. El primero, el estado físico de Mostovoi, que sufre una microrrotura de fibras en un abductor. El entrenador del equipo gallego se mostró bastante pesimista y prácticamente le ha descartado para el encuentro de esta noche.

El otro motivo de inquietud es la presión que ejercerán los 40.000 enardecidos hinchas del Lens. Víctor Fernández estuvo hace poco viendo un partido en el Felix Bollaert y todavía se confiesa impresionado. Aparentemente, la plantilla del Lens se toma las cosas con cierta relajación, o al menos así parecía al contemplar ayer la estampa de su delantero Pascal Nouma fumándose tranquilamente un cigarrillo en la sala de prensa del estadio, tras haber concluido su entrenamiento.

Lens: Warmuz; Mawene, Ismael, Pierre-Fanfan, Queudrue; Blanchard, Nyarko, Dacourt, Brunel; Sakho y Nouma.

Celta: Pinto; Velasco, Sergio, Cáceres, Juanfran; Makelele, Giovanella; Karpin, Mostovoi o Revivo, Gustavo López; y Mc Carthy.