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La tensa espera de un ariete

Una lesión detiene la fulgurante carrera de Van Nistelrooy hacia el gol

Acostumbrado a una carrera exitosa sin freno, Ruud Van Nistelrooy (Oss, 1976) venía pidiendo desde hace algún tiempo un momento de pausa para responder de forma serena a las preguntas que se acumulaban para saber sobre su futuro. Justo cuando parecía haber tomado una decisión, en el momento en que había descartado el calcio en beneficio de la Premier League, el delantero centro del PSV Eindhoven se ha visto sorprendido por una lesión de ligamentos en la rodilla derecha que le ha dejado en punto muerto. Ocurrió en un amistoso, como suelen pasar las lesiones más feas, contra el club danés Sikelborg, a primeros de mes, y se desconoce cuándo reaparecerá, pese a que se confía en una recuperación que no supere las seis semanas.No le ha quedado al PSV otro remedio que encomendarse a Bruggink para ratificar su liderato, mientras que Rijkaard estudia recurrir de nuevo a la pareja Kluivert-Bergkamp para defender el poder ofensivo de una Holanda que siempre se queda a un gol del primer puesto. El PSV, en cualquier caso, ya está familiarizado con comercializar con sus figuras y, en especial, con sus arietes. Vendió a Romario y a Ronaldo, y también a Cocu, Zenden, Stam y Jonk, así que se ha resignado a negociar por Nistelrooy.

El Roma puso el año pasado 2.000 millones de pesetas sobre la mesa del club holandés, cuando el ariete se calzó la Bota de Plata con 31 goles, cinco menos que Jardel, el delantero centro brasileño del Oporto, y siete más que su compañero de equipo Nilis, con el que formó una delantera incontenible. El PSV ya ha pensado incluso en su sustituto, que bien podría ser Carew, el punta del Rosenborg. No ha decidido, en cambio, a que equipo venderá a Nistelrooy, con contrato en vigor hasta 2003, y menos si también Nilis se larga al Aston Villa. El Valencia y el Madrid han estado en la puja. La duda está en saber cuánto valen en el extranjero los 30 goles de media de un delantero holandés, aunque el PSV no baja de los 4.000 millones de pesetas.

Los ingleses parecen los mejor colocados, más que nada porque a Van Nistelrooy le seducen el Chelsea y el Arsenal, el club de su compatriota Bergkamp; quizá porque nunca le gustó Shearer, o incluso porque reniega de los arietes de la Premier, piensa que el mejor marco para expresar su fútbol es Inglaterra y no Italia, aunque su ídolo fue punto de referencia del calcio. Van Nistelrroy siempre quiso parecerse a Van Basten. Por su estampa (1,88 metros y 80 kilos) y movimientos, guarda una cierta similitud, y hasta sus remates de cabeza son igualmente discretos pese a la altura. Elegante, con una buena base física por su dominio del tenis y el taekwondo, duro y ágil, sabe desmarcarse, es buen llegador, tiene un buen control de pelota y es muy preciso y potente en el remate.

Por su carácter tranquilo y calculador, no acostumbra a perdonar. Era sabido que esta temporada había anunciado su disposición a intercambiarse los papeles con Jardel, y antes de lesionarse le superaba por dos goles (29 contra 27) y, además, había marcado seis tantos en la Liga de Campeones. Van Nistelrooy siempre respondió a las expectativas que generó desde que comenzó a patear una pelota a los cinco años en el Nooit Gedacht. A los 14 fichó por el Margriet, de Oss, su localidad natal, y dos años más tarde, con 16, debutó en el Den Bosch. Unos 80 millones de pesetas pagó el Heerenveen por su fichaje y le vendió una temporada después al PSV por una cifra récord en Holanda de 1.300 millones, el precio en que se tasaron sus 13 goles en 32 partidos. Llegado a Eindhoven, no se concedió ni un respiro. Marcó 31 tantos en 34 partidos en su primer año, con Robson como entrenador -"lo tiene todo: control, velocidad, olfato, ambición y se permite alguna que otra genialidad", aseguró el técnico inglés-, y ahora que está a las órdenes de Gerets, suma 29.

Jugador de gran calidad, digno de un país fecundo en la producción de exquisitos arietes, Van Nistelrooy ha pasado de no saber controlar el tiempo -"todo sucede demasiado deprisa para asimilarlo"- a contar los días que le quedan por reaparecer y ganarse una plaza para la próxima Eurocopa con Holanda, selección en la que debutó el 18 de noviembre de 1998 en un partido grande, frente a Alemania (1-1). Nistelrooy aspira a alinearse junto a Kluivert. Y es que ambos nacieron el mismo día, el 1 de julio de 1976.

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