Los dos candidatos de izquierda comparecen juntos el último día de campaña para pedir el voto de los indecisos

Joaquín Almunia y Francisco Frutos comparecen hoy juntos, último día de campaña electoral, para explicar en sendas declaraciones, pactadas previamente, los cambios que piensan introducir en la vida política, social y económica de España si ganan las elecciones, con la premisa de que se beneficiará la inmensa mayoría sin arriesgar el crecimiento y el desarrollo del país. Ambos políticos pretenden escenificar las bases de lo que será su gobierno si con los escaños del PSOE-Progresistas y de IU logran conseguir una mayoría parlamentaria.La llamada vehemente a los abstencionistas de izquierda para que vayan a las urnas será otro de los objetivos que se han propuesto. Almunia aseguró ayer que si es investido presidente del Gobierno formará el gabinete con independientes, miembros de Izquierda Unida y de Nueva Izquierda, de los que muchos serán mujeres.

Tanto el PSOE como IU han querido que la última imagen de campaña, antes del cierre a medianoche, sea la de Almunia y Frutos juntos. Si cuando firmaron el pacto de gobierno consideraron que con esa foto de compromiso era suficiente, pronto cambiaron de opinión al comprobar que la primera oleada de adhesiones de los abstencionistas no tenía continuidad. Hubo un segundo acto la semana pasada acompañado de un Manifiesto de intelectuales y artistas que hasta ayer mismo seguía incrementándose con la llegada de nuevas firmas. Pero desde ese mismo día unos y otros empezaron a pensar en el acto de hoy. Los datos que tienen ambos partidos les provocan sensaciones ambivalentes ya que con algo más de un 30% de "indecisos", todo es posible.

Los responsables de campaña del PSOE y de IU, Ciprià Ciscar y Víctor Ríos, respectivamente, acordaron que el acto se celebrará en un céntrico hotel madrileño a la una de la tarde, después de actos por separado con jóvenes. Los asesores de ambos preveían que hasta esta misma mañana no tendrían cerrada la declaración que ambos leerán, ya que uno y otro debían dar su visto bueno y no iban a tener mucho tiempo para redactar y pactar el texto de un tirón.

Si en un primer momento PSOE e IU pretendieron que el acto de hoy tuviera un fondo sindical, aunque se iba a utilizar el eufemismo de "encuentro con los trabajadores", las dificultades observadas en las planas mayores de CC OO y UGT para que sus líderes, Antonio Gutiérrez y Cándido Méndez, especialmente este último, acudiesen a él motivaron que desde hace tres días en el PSOE se hablara de "cambio en el formato". Gutiérrez, según Europa Press, estaba dispuesto a ir a ese acto pero decidió no acudir al conocer la inasistencia de Méndez, según el portavoz de CC OO, Javier Doz.

En el equipo electoral del partido de Almunia se estimó que lo importante es que Almunia y Frutos comparezcan juntos. Tanto en el PSOE como en IU se aprecia un deliberado desinterés en hablar de las causas que han llevado a no forzar el encuentro con los sindicalistas con el argumento de que está muy lejos de su ánimo provocar un conflicto "con o entre los sindicatos", señalan miembros del PSOE. Esta actitud de restar importancia se apreció también ayer en Frutos. "Quizá los sindicatos han pensado que han mostrado de antemano su apoyo al pacto y que no necesitan más", dijo. "Creo que el apoyo de los sindicatos mayoritarios al acuerdo lo tenemos y la imagen de apoyo ya está dada", remachó.