Muere el ciclista de 54 años arrollado en la carretera de Colmenar Viejo

Antonio Rivera García, el ciclista de 54 años arrollado el pasado lunes por un automóvil en la M-607 (carretera de Colmenar Viejo en dirección a Madrid), murió ayer al mediodía en el hospital La Paz. Según el centro médico, el deportista no pudo superar el grave traumatismo craneoencefálico que sufrió al ser alcanzado por el coche. El percance de Antonio sucedió en un tramo de la M-607 en el que desaparece el carril-bici, pintado de rojo en el arcén. Los ciclistas consideran este punto una trampa mortal.

El fallecido, vecino de Tres Cantos, viajaba en una bicicleta de montaña en dirección a Madrid. Según los testigos, el deportista trataba de esquivar a los coches que se incorporaban a la M-40 cuando se produjo el percanceEl accidente ocurrió a las 17.10 en la intersección de la carretera M-607 y la M-40, un punto negro para los deportistas debido a que en esa encrucijada se acaba el carril-bici o arcén pintado de rojo. "En ese punto te la tienes que jugar para pasar la intersección por la M-40", señaló ayer el ciclista Antonio Alix. "Si a lo largo del arcén pintado hay peligro, en ese lugar donde murió el hombre el peligro es total, los coches vienen a ciento y pico y te la tienes que jugar", añadió otro aficionado del Club Tricantino.

El carril-bici de la carretera de Colmenar Viejo es un arcén pintado que los ciclistas consideran una trampa mortal. Con este último accidente, son ya 10 los ciclistas fallecidos en la carretera de Colmenar Viejo desde 1995, según los datos facilitados por la Guardia Civil de Tráfico.

Carriles separados

El presidente de la Federación Madrileña de Ciclismo, Rogelio Hernández, reclamó ayer un carril exclusivo para ciclistas ante al alta siniestralidad de esa vía: "Con tantos muertos, no sé como no se han tomado medidas urgentes", subrayó. "Pedimos carriles-bici separados de la carretera. Entre las bicicletas y los coches tendría que haber como mínimo un metro y medio de distancia", puntualizó Hernández.

Las críticas al carril-bici de la carretera de Colmenar no han caído en saco roto. La Consejería de Obras Públicas y Transpotes, de la que depende esta carretera, aprobó un plan de ensanche de la M-607, que incluye una vía protegida para los ciclistas, separada de la carretera y sin cruces peligrosos.Las obras se iniciarán en tres semanas. La principal novedad de esta vía será un muro de hormigón que protege su recorrido de la invasión de los vehículos y camiones que transitan por la carretera de Colmenar Viejo y de pasarelas para salvar los cruces. La M-607 ya dispone de siete kilómetros de carril-bici protegido, entre Soto del Real y Colmenar Viejo. El segundo carril para bicicletas de la región está situado la carretera de San Martín de la Vega (M-301).