Poner en su sitio a los nacionalistas
El candidato de Izquierda Unida a la presidencia de la Junta de Andalucía, Antonio Romero, y el secretario regional de Política Institucional del PSOE, José Caballos, coincidieron ayer en valorar como una ventaja del acuerdo alcanzado por sus respectivas direcciones federales el que el debate electoral no esté condicionado por los partidos nacionalistas, habituales compañeros de legislatura de los dos últimos Ejecutivos de la nación.El también coordinador de IU, desde Granada, consideró que uno de los aspectos más positivos del pacto será la posible formación de un Gobierno central que pueda prescindir del respaldo de Convergència i Unió, informa Francisco J. Titos. Romero arremetió contra los nacionalistas catalanes y destacó que el acuerdo suscrito permitirá "a la vida política española dejar de pagar los peajes que venía cobrando el presidente de la Generalitat de Cataluña, Jordi Pujol, tanto a Felipe González como a José María Aznar" por el apoyo a sus respectivos gobiernos.
En similares términos se pronunció Caballos, para quien se abren unas "perspectivas interesantísimas para la izquierda para construir una alternativa de progreso" en España. El pacto logra también, en su opinión, desplazar el centro del debate electoral establecido por los nacionalistas catalanes y vascos con el Gobierno central. "El triángulo Madrid-Barcelona-Bilbao se desplaza a un escenario de confrontación entre la izquierda y la derecha".
Para José Caballos, muchos electores de centro "de verdad" están deseando que un gobierno progresista ponga "en su sitio a los nacionalistas" y que no sean los que "manden y condicionen a las fuerzas políticas nacionales" cuando obtienen en las urnas alrededor de un millón de votos, frente a los 13 millones de sufragios que suman las dos fuerzas de izquierdas.
La incredulidad con la que el PSOE de Andalucía ha recibido el cambio de talante de los dirigentes andaluces de Izquierda Unida también lo reflejó Caballos: "Es muy positivo que IU cambie de ser un partido de cultura testimonio a un partido de cultura de gobierno, aunque es posible que el señor Romero tarde unos días en entender que la guerra civil en la izquierda ha terminado".
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